¿Quién cuenta los crímenes en Uruguay?

Por Carlos Lemos

Nadie. Esa es la respuesta a la inquietante pregunta del título. Y ¿por qué? Porque en Uruguay siempre fue así. El tema hoy es abordado en razón de que apareció en escena una fundación vinculada al Partido Colorado que creó su propio Observatorio Criminal y anota los homicidios. Dicha Fundación dice que el Ministro del Interior oculta datos.

Si el tema no fuera tan serio daría para reventar de risa. ¿Y por qué?

En primer lugar porque la Fundación tiene razón, el Ministro actual oculta datos como lo hicieron todos los gobiernos desde que se empezaron a dar a conocer las estadísticas de delitos.

La Jefatura de Policía de Montevido es un centro de poder, la gente lo debe tener claro.

Tanto es así que al Comando llegan cientos de denuncias de hechos, bajo la denominación de “zetas” y los jerarcas juegan con la información como si fueran naipes. “Esto no, esto no, esto no, largá esto. Esto no”. Es así de sencillo y cruel.

Conozco de memoria el procedimiento porque asistí decenas de veces a presenciarlo cuando me querían ocultar algo.

El jerarca de turno sacaba la información que le exigía de entre la pila de “zetas” y a regañadientes me la confirmaba. Por supuesto que el mamotreto con las cosas ocultas volvían a su lugar de origen, generalmente en el segundo cajón del escritorio del Jefe de Policía.

Colorados, blancos, dictadores y ahora frentistas no han cambiado para nada el mecanismo, por la razón del artillero, que le dicen.

¿Qué es eso?

Nada del otro mundo. El Ministro del Interior, se sabe, es el ministro político del presidente de turno. Por tanto en sus manos siempre estuvo el monitoreo de la seguridad o inseguridad pública.

Si la situación se tornaba un poco espesa, entonces rápidamente se ponían en funcionamiento los relatores para “dar cuenta” de la cantidad de robos y muertes violentas y compararlas con meses anteriores. Por supuesto que, siempre, con cifras maquilladas.

Ahora resulta que los colorados piden más transparencia, justo ellos inventores del manejo pernicioso, antidemocrático y falaz de la información sobre los hechos de violencia y la actividad de la delincuencia en general.

Pero “Vamos Uruguay” no solo se atreve a dar cifras de personas asesinadas sino que vaticina muy suelto de cuerpo que más de 40 uruguayos serán asesinados de aquí hasta que finalice el año.

Calculan que se llegará a unas 300 muertes violentas, sin mencionar que hasta ahora el pico más alto se dio en 1998, bajo el gobierno del Partido Colorado con 244 casos y cuando la pasta base ni se conocía.

El observatorio “privado” dice actuar como “ente testigo, que monitorea la información y los datos disponibles”.

Los chicos colorados explican que su trabajo responde a un relevamiento de los homicidios que tienen como base los reportes de prensa, los partes oficiales y los datos del Ministerio del Interior, sobre los cuales se realizan cruzamientos de datos y depuración de información.

Mis queridos amigos, sean serios, si esas son las fuentes de información estamos en la misma de siempre.

Nada ha cambiado. Además anden con cuidado, porque otra vez el invento puede matar al inventor.