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CAUSA ABIERTA

La candidata del Frente Amplio a la Intendencia de Montevideo reconoce que muchos en la izquierda no la quieren

La candidata del Frente Amplio a la Intendencia de Montevideo reconoce que muchos en la izquierda no la quieren

La candidata del Frente Amplio a la Intendencia de Montevideo, Ana Olivera, dijo que “hay gente disgustada” con su candidatura y “son frenteamplistas”. Aclaró que “estas son las reglas y la campaña no es el momento de discutirlas”. Olivera dijo a Ultimas Noticias que dará “un vuelco a la limpieza” porque se incluye en el porcentaje que piensa que la ciudad “está sucia”. Nuevos sistemas de clasificado y disposición final, más contenedores, barrido en los alrededores, jornadas para recoger “basura inédita” y clasificadores fuera de las avenidas serán las primeras medidas. -La elección de su candidatura fue resistida por parte del FA. ¿Cómo considera que quedó la situación?
-Hubo gente que quedó dolorida con mi candidatura y eso hay que hablarlo. Y también tenemos que reconocer que hay frenteamplistas enojados con la falta de limpieza, con las veredas rotas, con los árboles. Ellos también dudan y eso significa apostar al mano a mano y al trabajo en todo Montevideo.
-¿Las heridas se mantienen?
-Sí. Algunos cuestionan la forma que nos hemos dado de resolver. Que lo cuestionen los militantes de otros sectores políticos no es el tema, pero me preocupa que lo hagan integrantes de esta fuerza política, a veces con el argumento de que nos ajustamos a normas lejanas a la realidad. Nuestro estatuto data del año 1993, lo discutimos durante dos años y se plebiscitó a padrón abierto. Antes se resolvía solo por consenso y cualquier oposición trababa todo. A partir de 1993 se empezó a resolver por mayoría pero se establecieron cantidades muy altas porque veníamos de una realidad de consenso.
-¿La realidad actual no es diferente?
-Sí. Hoy uno no puede negarse a discutir pero no podemos olvidar que todos los sectores políticos resolvieron antes de que se manejara mi nombre, que Montevideo debía tener candidato único. No fue una imposición de nadie. Fue una decisión que muchos tomaron no por un tema de principios, sino porque entendían que convenía políticamente. Todos admitimos esa realidad.
También es verdad que el PS no llevó la candidatura de Daniel Martínez hasta los límites que el estatuto permitía, que era convocar al Plenario Nacional. Pero a pesar de todo, hay personas que piensan que hubo intencionalidad. Aquí la realidad es que nos regimos por determinadas reglas, que podremos revisar después de mayo, pero estas son las reglas y la campaña electoral no es el momento de discutirlas. Hay que reconocerlo y no barrerlo debajo de la alfombra. Hay gente disgustada y son frenteamplistas.
-Si resulta electa intendenta de Montevideo, ¿cómo enfrentará el tema de la limpieza?
-El programa plantea dar un vuelco al tema de la limpieza. En recolección de residuos, más del 50% de los montevideanos piensa que el servicio es bueno pero es elevadísimo el porcentaje que cree que la ciudad está sucia. Y me incluyo en el porcentaje.
Necesitamos un nuevo plan estratégico que no es contratar una consultoría para que dedique un año a pensar el circuito de la limpieza. Hay que revisar cosas como el clasificado.
-¿Por qué considera que los planes pasados fracasaron?
- Porque no se trata solo de clasificar en la casa sino que hay que tener los contenedores adecuados, no mezclar después de recoger la basura, tener plantas de trasbordo. Hasta ahora no ha funcionado porque si se reparten bolsitas amarillas para clasificar y después se ponen contenedores en pocos lugares o se recoge todo junto, la gente se pregunta para qué y no lo hace. Hay que pensar en todos los elementos.
-¿Se va a revisar el sistema de disposición final?
-Podremos resistir unos años pero necesitamos un sistema de disposición final metropolitana porque hay días que no se puede trabajar en Felipe Cardozo, porque con la altura que tiene los camiones no pueden entrar y a eso se suma el tema de los clasificadores.
-¿Por donde pasan las medidas inmediatas?
-Por el barrido en el entorno de los contenedores y con una campaña que involucre a los vecinos en la limpieza de la ciudad. Es cierto que los clasificadores ensucian el entorno de los contenedores pero además no son suficientes y la gente deja la basura al costado. Donde sea necesario, habrá que poner más contenedores. Esto es algo a priorizar y la primera señal debe ser de la IMM.
Otra medida inmediata serán las limpiezas especiales que implican tener jornadas especiales para sacar la basura "inédita", es decir las cosas que no se necesitan más en la casa y que ocupan lugar en los contenedores. No será en todo Montevideo al mismo tiempo pero se fijarán días y horas para recoger esos elementos en los distintos municipios.
-¿Cuál será la política respecto a los clasificadores?
-Allí hay un problema de fondo porque se trata de emprendimientos familiares, lo que implica que los niños y adolescentes están arriba de un carro en lugar de estudiar. Muchos no quieren dejar esa tarea porque ganan más que en un trabajo formal con excepción de la construcción. El problema es que la construcción no necesita peones sino especialistas. Entonces hay que coordinar acciones con el gobierno nacional para capacitarlos.
Además hay que fomentar las cooperativas, que a veces generan otras posibilidades como viveros surgidos a partir de la recolección de materia orgánica. Estas experiencias existen pero no son masificables. Es una tarea a largo plazo.
-¿Hay que sacarlos de las avenidas?
-Hace mucho hubo un acuerdo y hay que reflotarlo. Se había logrado que entraran por las transversales y es vital retomarlo pero el problema principal no lo generan los carritos sino los "bolseros", que son los que clasifican en el lugar.
- ¿Se tomarán medidas para superar la burocracia?
-Los municipios atarán todas las posibilidades. Nos permitirán airear el proceso de participación ciudadana y entusiasmar. Tener presupuesto asignado les dará otra posibilidad de resolución de los problemas y permitirá superar la burocracia que surge de la imposibilidad de los Centros Comunales Zonales de responder de inmediato a los planteos de la gente.
Desde allí se podrá dar respuesta inmediata a temas como podas, control del arbolado o bacheo rápido. Habrá que retomar la tarea de las cuadrillas de bacheo móvil para solucionar el pequeño pozo. A la gente le molesta el tiempo que se demora en dar respuesta a los problemas y esto se solucionará a través de la acción rápida de los municipios.
Planificación de la ciudad
La candidata del Frente Amplio (FA) a la Intendencia de Montevideo (IMM), Ana Olivera, aseguró que en caso de ganar las elecciones apostará a la recuperación de los espacios públicos y las centralidades, así como a la construcción planificada de la ciudad con el objetivo de "generar integración".
A modo de ejemplo, señaló que se pondrá énfasis en los planes de acción urbanística como los proyectados para Goes y la Ciudad Vieja. "En torno al Mercado Agrícola está la construcción de cooperativas, la recuperación de Alpargatas, el trabajo vinculado a la zona de General Flores, la articulación de políticas con las Facultades de Medicina y Química, la refacción del barrio Reus. Son acciones en torno a un barrio que se estaba tugurizando y eso es integración social", explicó.
Apuntó que también se buscará recuperar los espacios públicos para que se transformen en "centralidades de uso democrático". Un ejemplo es la plaza Líber Seregni en el Cordón, en cuyo entorno "la inversión privada comenzó a rellenar los esqueletos". Olivera espera que en el próximo periodo ocurra algo similar con la recuperación del espacio donde estuvo la antigua terminal de Arenal Grande, donde "se abrirá un proceso licitatorio para incorporar a los vendedores en otras condiciones".

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