Blogia
CAUSA ABIERTA

Uruguay: Salvó la vida a una beba prematura en una carpa

Uruguay: Salvó la vida a una beba prematura en una carpa

Una joven enfermera logró salvar la vida de un prematuro de 7 meses de gestación. La historia, que es tan increíble como conmovedora, ocurrió en el balneario Las Cañas, en el departamento de Río Negro.
La guardia médica de la policlínica de Las Cañas (mixta entre Salud Pública y mutualista) transcurría con absoluta calma en la noche del lunes. Pero faltando 20 minutos para la medianoche, la médica de guardia y la enfermera recibieron el llamado de un joven que se encontraba trabajando en un restaurante cercano. El hombre pedía ayuda para su pareja, que estaba dando a luz en un campamento ubicado a 700 metros de la policlínica.
Ante el pedido desesperado las dos mujeres se miraron y no pronunciaron una sola palabra ya que cada una sabía muy bien el rol que debía cumplir ante tal situación.
Como en el balneario no hay ambulancia y los médicos no tienen vehículos para movilizarse, la primera en salir corriendo fue Cynthia Prestes (23), una enfermera que desde hace dos años trabaja en el sanatorio local, y atrás la médica.
"La carpa de la chica estaba en una zona muy oscura. No sé como hice para llegar porque me choqué con árboles, parrilleros y carpas. Sabía que cuando llegara lo primero que tenía que hacer era cortar el cordón y pinzarlo. Mi único objetivo era hacer lo posible para intentar salvar la vida del bebé", recuerda Cynthia en diálogo con El País. En tanto, la doctora debió hacerse cargo de la madre ya que estaba sufriendo un importante sangrado.
Según comentó Prestes, al ingresar a la carpa se encontró con la parturienta sentada en un balde y el recién nacido adentro del recipiente. "Ella me decía que nunca pensó que iba a dar a luz porque simplemente se levantó a orinar", comentó la enfermera.
Al ver el panorama el proceder de las profesionales tenía que ser rápido para que la mujer y el bebé salieran con vida del imprevisto parto. "Observé que el estado de salud del bebé no era bueno porque estaba en una crisis cianótica, no respondía, no lloraba, no respiraba y estaba quedando bien oscuro", aseguró Preste.
En ese momento la enfermera atinó a darle calor y una vez más salió corriendo buscando un vehículo para trasladarlo hasta Fray Bentos.
"Estaba sola con el bebé, tenía que llevarlo vivo (a la emergencia) y por lo tanto arreglármelas como fuera. Llegué hasta una churrasquera, lo puse sobre una mesa y empecé a hacerle respiración boca a boca y masajes de reanimación cardíaca".
En ese momento apareció Hugo Pulas, de la ong Abrazo a la Esperanza. Pulas, que administra el camping, trasladó de urgencia a la enfermera y el recién nacido hasta la ciudad, a 8 kilómetros de distancia. "Fue un trayecto eterno. Los dos íbamos llorando de los nervios y la angustia", recuerda profundamente emocionada.
En el camino la enfermera siguió intentando reanimar al bebé. "Tuve que aspirarlo con mi propia boca y debí tragarme sus secreciones, pero no me importó, lo único que queríamos era salvarle la vida y lo logramos", comenta con orgullo.
Poco antes de llegar a Fray Bentos, se encontraron con la ambulancia del sanatorio que se hizo cargo de la situación.
"La pediatra y mis compañeros enfermeros me felicitaron porque había hecho lo correcto y no podían creer cómo el prematuro recién nacido había logrado salvarse. Para mí fue un milagro", comentó y agregó que también ella debió ser socorrida con ropa porque quedó "empapada en sangre".
Ayer de tarde la joven fue a la maternidad del hospital para interesarse en el estado de salud de la bebé y se encontró con la sorpresa de que los padres decidieron llamarla "Cynthia", en su homenaje. Cynthia Ayelen pesó 1,830 kilogramos, midió 46 centímetros y ayer se encontraba estable en una incubadora.
Sin saberlo, fue protagonista de una historia que muchos recordarán por años.
La cifra
1,830 Kilogramos pesó Cynthia Ayelen que nació de siete meses en un campamento de Fray Bentos. La bebé midió 46 centímetros.

0 comentarios