Camarero musulmán salvó la vida de dos clientas en el atentado de París
De entre todo el horror vivido en París el pasado viernes también se pueden sacar historias positivas. Hombres y mujeres que en una situación tan extrema pudieron sacar fuerzas y convertise en héroes. Como Safer. Este musulmán francés trabaja como camarero en Le Carillon, el bar situado en el 18 de la Rue Alibert en el que fallecieron 15 personas por los disparos de los yihadistas.
A pesar de la matanza, pudo haber más muertos de no haber sido por Safer. En medio de la lluvia de disparos, este trabajador fue capaz de arrastrar a varios clientes malheridos al sótano del establecimiento. En concreto, Safer pudo llevarse a dos mujeres heridas de bala, mientras en la planta de arriba los pistoleros remataban a las personas que habían alcanzado con las primeras ráfagas.
El periódico italiano LaStampa ha podido entrevistar a Safer, que recuerda que los 8 terroristas implicados en los ataques no son musulmanes de verdad: “Eso no es Islam, sino otra cosa”, asegura. El camarero de Le Carillon es el mejor ejemplo de que esta religión es una víctima más de la sinrazón radical.
El caso de Safer recuerda al de Lassana Bathily, un musulmán de 24 años que el pasado mes de enero protegió a los clientes del supermercado judío Hyper Casher de la Puerta de Vicennes (este de París), que fue atacado por un terrorista que mató a cuatro rehenes. Bathily ayudó a una quincena de personas a esconderse en el sótano del establecimiento, a los que resguardó en una cámara frigorífica hasta que la policía pudo acabar con el asaltante.
WTB
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