Estado Islámico ata a rehenes a las columnas de Palmira y luego los hace explotar

En un nuevo capítulo de perversiones y atrocidades, el grupo terrorista Estado Islámico ató a las columnas de la ancestral ciudad de Palmira a rehenes y luego los hizo explotar. Así mató a por lo menos tres personas que tenía retenidas en la ciudad antigua siria, dijeron activistas este martes.

Este es el último de los impactantes asesinatos cometidos por el grupo, que ha convertido las decapitaciones e incluso inmolaciones en su sello de identidad.

A principios de esta semana, la milicia radical publicó en redes sociales imágenes que supuestamente muestran a sus miembros atropellando con un tanque a un soldado del gobierno sirio. Se sabe que los radicales tienen tanques, en su mayoría capturados en combates con tropas sirias o en las zonas que controla del vecino Irak.

El Estado Islámico ha destruido muchos templos y piezas de la época romana en Palmira, incluyendo el espectacular Templo de Bel y el icónico Arco del Triunfo.

El grupo arrebató el control de Palmira a las fuerzas del gobierno de Damasco en mayo y considera que este tipo de antigüedades promueven la idolatría. Expertos dicen que promueven y documentan estos ataques también por su impacto y para extender el temor y el miedo. Y además saquean estos sitios arqueológicos y venden sus piezas en el mercado negro en todo el mundo, en un verdadero y rentable negocio.

Un activista en la ciudad siria, que responde al nombre de Nasser al-Thaer, dijo el martes que los asesinatos tuvieron lugar el día anterior por la tarde en las ruinas de Palmira. La identidad de los fallecidos, que eran civiles, se desconoce por el momento, dijeron Al-Thaer y el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, con sede en Gran Bretaña y que trabaja con reportes de una red de informadores sobre el terreno.
(Fuente: agencias)