Blogia
CAUSA ABIERTA

Poliamor: tres mujeres se casaron en Brasil y quieren ser madres

Poliamor: tres mujeres se casaron en Brasil y quieren ser madres

Las tres mujeres viven juntas desde hace tres años. Una es empresaria, la otra dentista y la tercera es gerente administrativa. Una jueza las casó en Río de Janeiro en la que fue la segunda unión poliafectiva estable del país. La primera fue en 2012, entre dos mujeres y un hombre.

La escritura reconoce al trío como familia, establece separación de bienes y da potestades a cada una para decidir sobre temas médicos de las otras. Además, las mujeres declararon en un documento su intención de que una de ellas tenga un hijo por inseminación artificial, y que en el certificado de nacimiento del bebé estén los apellidos de las tres. A su vez, las tres mujeres firmaron testamentos en los que dividen sus bienes.

“Somos una familia. Nuestra unión es fruto del amor. Voy a quedar embarazada y estamos preparándonos para eso, incluso financieramente”, contó la empresaria al diario O Globo. “La legalización es una manera de que el bebé y ninguna de nosotras se quede desamparada. Queremos disfrutar de los derechos que todo el mundo tiene, como la licencia de maternidad”, apuntó.

En Brasil no existe jurisdicción para este tipo de uniones, y para su validez se apela a a los fundamentos del Tribunal Supremo para reconocer a las parejas homosexuales, desde 2011.

La notaria que las casó, Fernanda de Freitas Leitão, ya reconocía la unión de parejas homosexuales desde el año 2000. Según dijo, hacía años que esperaba poder amadrinar un trío en su notaría.

“El pilar que sustenta cualquier relación de familia es el afecto. Y estas tres mujeres tienen todo para formar una familia: amor, una relación duradera, intención de tener hijos. (...) En el derecho privado, además, lo que no está prohibido está permitido. No puedo garantizarles derechos inmediatos, tendrán que luchar en los tribunales para realizar la declaración de la renta conjunta o contratar un seguro médico, pero ahora están protegidas”, explicó la jueza.

La polémica en torno a la validez de esa unión, y a la posibilidad de un niño de tener tres madres, lleva años de vigencia a nivel de la academia, pero es relativamente nueva en la opinión pública.

A nivel local, el Colegio de Notarios de Brasil se desvincula de las decisiones individuales de sus colegiados. Para algunos juristas, esa unión es violatoria de la Constitución, que establece expresamente que la unión estable solo puede ser constituida por dos personas y el reconocimiento del Tribunal Supremo de las uniones homosexuales también se refiere específicamente a dos personas”, explica la abogada especialista en derecho familiar Regina Beatriz Tavares, que niega la posibilidad de que el futuro hijo de esas mujeres pueda tener tres madres registradas.

“La poligamia en Brasil no tiene ningún soporte constitucional. No defiendo un único tipo de familia, pero el principio de unión está restringido siempre a relaciones monógamas, la sociedad brasileña no acepta matrimonios de tres personas, sean del sexo que sean”, declara Tavares, también presidenta de la Asociación de Derecho de Familia y Sucesiones (ADFAS).

“Cuando comencé a oficializar parejas homosexuales ocurría lo mismo, me acusaban de que era ilegal. Todas las uniones que se salen de lo tradicional acaban abriendo el mismo camino. Al comienzo hay un rechazo grande, después la jurisprudencia comienza a reconocerles derechos familiares hasta que se normalizan. Brasil, incluso, ya cuenta desde 2012 con casos de hijos con más de dos padres, al incluir, por ejemplo, al donante conocido de una inseminación artificial. La historia se repite ahora”, declara la jueza Freitas.

La unión oficial de este trío también resulta incómoda a nivel parlamentario, en este momento en que los legisladores conservadoras mantienen una batalla en el Congreso para restringir las políticas públicas al modelo de familia tradicional formado por un hombre y una mujer. Esta iniciativa parlamentaria está cerca de ser aprobada en el Senado.

El modelo de matrimonio con hijos está lejos de ser mayoritario en el vecino país, según datos del Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE) de 2013. Los nuevos tipos de familia (hogares monoparentales y uniones homosexuales) representan un 56,1% de los domicilios. Si en 1980 el 75% de los hogares estaba formado por matrimonios con hijos, en 2013 el número cayó hasta el 43,9%.

El debate sobre el poliamor está presente en varias capitales de Brasil donde se forman grupos, fiestas y actividades a través de las redes sociales. Precisamente en Río de Janeiro, la reunión bautizada como “Poliencontro” ya ha celebrado una decena de ediciones, con eventos en espacios públicos de la ciudad.

 

0 comentarios