Estudiante universitario procesado: marchas militares, equitación y elogios a Larrañaga...¿Tupita?
Marcelo Hospitale, el estudiante universitario procesado por la jueza Ana de Salterain por los incidentes del Codicen, no ocupa ningún cargo de dirigente estudiantil, ni milita en ninguna de las agrupaciones.
Así lo informó a La República un dirigente de la Federación de Estudiantes Universitarios del Uruguay, quien explicó que Hospitale tampoco tiene función en el centro de estudiantes de la Facultad de Ciencias Sociales (CECS) donde estudia. “Lo apoyamos solo por ser un estudiante universitario”, agregó.
El estudiante alcanzó notoriedad por sus declaraciones al diario El País en las que aseguraba que no iba a cumplir la pena impuesta. “Esto es una persecución y yo soy un luchador. No me van a intimidar. No voy a cumplir con la pena, por mi honor que no lo haré, y si tengo que pagar con cárcel, así será. Resistiré”, aseguró.
Su fotografía en El País provocó que el dirigente blanco Sebastián Da Silva lo calificara como “tupita con iPhone”, que posa levantando el puño para que se lo celebren en Instagram”.
Esta ingeniosa definición provocó todo tipo de humoradas ayer al conocerse a través de las redes sociales que en su cuenta de Facebook, Hospitale, lejos de aparecer como un “tupita” ideológico, demostraba su gusto por las Marchas militares, la equitación y hasta expresaba elogios al lider de Alianza Nacional.
Caballos y marchas
En las redes sociales han circulados fotos sobre su pasión por los caballos, sus comentarios de añoranza a su paso por la escuela militar, y su gusto por las marchas militares.
Sobre su formación política, las pocas notas que se rescatan hablan de su participación en actos de Alianza Nacional. El primero de junio de 2014, Marcelo Hospitale Di Stasio escribió en su cuenta de Facebook, hoy borrada igual que su cuenta de Twitter, palabras elogiosas para el líder de Alianza Nacional que había perdido las elecciones internas. “Si bien Larrañaga hoy resulta vencido, no hay que olvidarse de su caudillismo, y de lo que representa su figura para los blancos del interior de la República.
En mayo serán las elecciones municipales y él sería clave en las definiciones del espectro de intendencias, además de ser un yunque inmejorable para conformar la fórmula blanca”.
Ese mismo año participó con entusiasmo en el acto realizado por el líder de Alianza Nacional, en homenaje a Wilson Ferrerira Aldunate a los 26 años de su desaparición física. Aclaró que lo hacía como analista político. Acto al que definió como “multitudinario, con aciertos y errores, pero por cierto de enorme riesgo realizado en el bastión frenteamplista”.
Otra de las notas que se han podido rescatar apunta a la ministra de Desarrollo Social y al Partido Comunista, y reclama porque ese partido dejó solos a los estudiantes de secundaria que reclamaban por más inversión en la enseñanza. “¿Con qué cara los comunistas nos vienen a llamar tira piedras ultras cuando nosotros pacíficamente fuimos en apoyo a gurises liceales que ellos dejaron solos a toda hora?”, escribió.
En otro párrafo señaló: “tienen cara para salir a señalar a una señora como Irma Leites, a un sindicato combativo y transparente como el Suatt”.
“Cientista político”
Ayer el diario El Observador presentó algunos datos acerca de su desempeño estudiantil mencionando algunos “problemas” que ha tenido en la Universidad.
Aunque hoy con 30 años cursa la Facultad de Ciencias Sociales y él mismo se ha definido como un “cientista político en formación” tuvo un pasaje por la Facultad de Veterinaria donde llegó a ser suspendido por agresión a otros estudiantes en 2012.
De los pocos rastros que han quedado en las redes sociales sobre sus publicaciones en internet, surge que cursó un colegio militar donde aprendió a montar a caballo, y ha publicado alguna foto de “la tanda 2006” donde todos los estudiantes militares aparecen con botas de montar.
Aunque no la menciona, en una nota escribe “tanto me dio esa escuela que no podría parar de hablar de la escuela, de lo que es, de su mística, es un honor formar parte del cuadro de alumnos de la escuela”, y agradece que su nombre esté grabado en el acta de egresados “y mi cuadro en el pasillo de la escuela”. “Por siempre amaré la escuela y mi orgullo y honor de ser exalumno”.
Reconoce que uno de sus gustos musicales son las marchas militares, y publica un link para que se pueda escuchar la “marcha de San Lorenzo” por una banda militar argentina.
Un miembro de la FEUU explicó a La República que si bien Hospitale no ocupa ningún cargo de dirigente estudiantil, ni milita en ninguna de las agrupaciones “ha manifestado ser afín a las ideas que promovemos en la FEUU para la Universidad de la República y se ha sumado a nuestra lucha para que el presupuesto de la ANEP-UdelaR sea del 6% del PBI”.
Pese a que Hospitale anunció por algunos medios que no cumpliría con la pena sustitutiva de prisión a lo que lo condenó la Justicia por su participación en los incidentes en las afueras de la sede del Codicen la semana pasada, ayer se presentó ante la Oficina de Supervisión de Libertad Asistida (OSLA) donde se le asignarán las tareas comunitarias que deberá cumplir.
El denominado “Tupita con iPhone” había sido tomado por algunos medios como la imagen de los estudiantes universitarios que reclaman por una mejor educación. En entrevista con el diario El País, dijo que “no me van a intimidar con este procesamiento, yo no voy a aprobar ese fallo que tuvo la jueza y no voy a cumplir las 200 horas de trabajo”. “Por mi honor”, agregó, “no voy a cumplir con la pena sustitutiva”.
Hospitale consideró que “acudir a ese trabajo comunitario es aceptar el fallo de la Justicia, y yo no lo acepto, por mi honor no lo acepto” y afirmó que “si tengo que pagar con cárcel lo que hice, así será y me resistiré, me van a tener que llevar en contra de mi voluntad, a la fuerza”.
Fuente La Repúbica
0 comentarios