Los Macri y el poder o el culebrón de la poderosa familia argentina

La confirmación del procesamiento del alcalde de Buenos Aires, Mauricio Macri, por escuchas telefónicas ilegales ha destapado las desavenencias en una de las familias más ricas del país a raíz del enfrentamiento del dirigente opositor con su padre, que coquetea con el Gobierno nacional. El alcalde insistió hoy en que el ex presidente Néstor Kirchner (2003-2007), esposo de la mandataria Cristina Fernández, orquestó la causa en su contra, después de que su padre, el empresario Franco Macri, se mostró como un férreo defensor de quienes dirigen los destinos de Argentina. "Pondría las manos en el fuego: el Gobierno no tiene nada que ver (con la causa por las escuchas ilegales)", sostuvo Franco Macri este fin de semana a su llegada de China, donde integró la comitiva de empresarios que acompañó a Cristina Fernández en su reciente visita oficial. Las afirmaciones pusieron de manifiesto las discordias en el seno de la poderosa familia Macri, cuyos integrantes ocupan desde hace años las portadas de las revistas del corazón tanto por el crecimiento de sus empresas como por los vaivenes de las relaciones sentimentales con las parejas de padre e hijo. "Las declaraciones de mi padre me han dolido", reconoció hoy el propio Mauricio Macri en una rueda de prensa ofrecida después de que la semana pasada un tribunal de segunda instancia ratificó su procesamiento en el marco de la causa que investiga escuchas a políticos y empresarios. Uno los dirigentes más cercanos al alcalde, el diputado Federico Pinedo, había lanzado horas antes "munición gruesa" sobre el empresario: "Mauricio es Macri, pero Franco es Kirchner", dijo en declaraciones radiales.
"Para la opinión pública es más popular Mauricio que Franco, así que no tiene más relevancia", sostuvo Pinedo al defender al líder de la conservadora Propuesta Republicana (PRO), quien aspira ser candidato a presidente en las elecciones generales del año próximo.
Precisamente, Mauricio Macri puede enfrentarse en los comicios a Néstor Kirchner, a quien varios oficialistas señalan como postulante para suceder a su esposa. Pero funcionarios y analistas estiman que la causa por escuchas ilegales que lleva adelante la Justicia argentina puede complicar la candidatura del intendente porteño. La Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional Federal rechazó el recurso de apelación presentado por la defensa de Macri y ratificó por unanimidad el fallo del juez Norberto Oyarbide por los delitos de "violación de secretos, abuso de autoridad y falsificación de documentos públicos en concurso con el de asociación ilícita", indicó el Centro de Información Judicial.
Oyarbide procesó al jefe del Gobierno porteño por considerar que fue "partícipe necesario" en una "asociación ilícita" responsable del espionaje ilegal destapado en octubre pasado.
Entre los espiados figura un cuñado de Mauricio Macri, Néstor Leonardo, aunque dirigentes de PRO aseguran que fue el padre del intendente quien ordenó seguir a su yerno.
"Está claro -afirmó Pinedo- que Franco contrató a una empresa de información para escuchar a su yerno" Leonardo, quien se casó con Sandra Macri, hermana de Mauricio.
El alcalde reiteró hoy que Kirchner, líder del gobernante Partido Justicialista (PJ, peronista) y secretario de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), está detrás la causa y le acusó de emplear "mecanismos extorsivos y violentos en perjuicio de quienes no son aliados".
"Kirchner logra que el mismo juez que le da impunidad para enriquecerse inicie esta causa sesgada para involucrarme a mí", sostuvo al alcalde en alusión a Oyarbide, quien meses atrás sobreseyó la causa por enriquecimiento ilícito contra el matrimonio de la presidenta y su antecesor.
Macri dijo, además, que pidió a sus abogados ir "cuanto antes" a juicio oral por esta causa para poder demostrar su inocencia y negó que vaya a tomarse licencia por el caso.
Sobre su padre, además de manifestarse dolido, señaló que lo que tenga que decir lo hará "personalmente", lo que puede dar paso a un nuevo capítulo del culebrón familiar, aunque esta vez quizás sea en la intimidad.