Alemania quiere sellar su pase ante Serbia

El equipo alemán debutó atropellando a Australia 4-0 y va por un triunfo en la segunda fecha del grupo D, en Port Elizabeth, donde podría sellar su pase a octavos. En cambio, los serbios, que cayeron en su estreno de forma amarga contra Ghana 1-0, no tienen margen de error y se juegan su supervivencia en su primer Mundial de la historia como país independiente, de la mano de Radomir Antic y su teniente coronel en el campo, Dejan Stankovic.
Con panoramas exactamente opuestos, el artillero serbio Milan Jovanovic prometió que su equipo, el de talla más alta del campeonato, detendrá a la máquina germana, que lidera la llave con tres unidades y mejor diferencia de gol que los ghaneses, que chocan mañana con los 'Socceroos'.
"Esperábamos ganar contra Ghana y ahora estamos heridos. Tenemos que sacar todos los puntos posibles", afirmó Jovanovic, más allá de reconocer que "Alemania se mostró impresionante contra Australia y es el equipo que más impacto ha hecho en el Mundial por ahora: es como una máquina".
El seleccionado de Joachim Löw confía en un nuevo recital de sus promesas juveniles Thomas Müller y el zurdito Mesut Ozil, que brillaron en la goleada ante los australianos e hicieron olvidar la baja por lesión del torneo del capitán Michael Ballack.
Sami Khedira fue el hombre que tomó ese papel específico en la medular y quiere repetir ante los serbios. "Tenemos que estar listos para correr contra Serbia y mostrar el mismo tipo de juego que hicimos ante Australia", afirmó el volante, de 21 años.
En el medio, Khedira deberá luchar contra un guerrero de mil batallas, el 'Dragón' Dejan Stankovic, capitán de Serbia, que llega con la triple corona conseguida con Inter de Milán (Copa-Liga-Champions) y un revanchismo interno después de haber fracasado hace cuatro años con la elástica de Serbia y Montenegro. "Este partido nos servirá para sacar conclusiones más claras", añadió Khedira, reconociendo la mayor entidad de Serbia, ya peligrosa en las eliminatorias al empujar hacia el repechaje a Francia.
Pero Alemania sabe que en cualquier momento puede definir un partido con la vieja dupla ofensiva exitosa de Alemania-2006, integrada por Lukas Podolski y Miroslav Klose, que precisamente abrieron el camino al triunfo contra los 'aussies'.
Müller y Cacau sellaron la goleada del debut perfecto de la 'Mannschaft'.
Aunque Klose, que lleva 11 goles en Copas del Mundo y quiere acercarse al récord del brasileño Ronaldo (15), se alegra por otro hecho mucho más táctico. "Siempre tuvimos la falta de un número 10 nato y ahora lo hemos encontrado", dice 'Miro', haciendo referencia al "nuevo Messi", Ozil.
"Mesut se ganó la posición y es un extra tenerlo para nosotros", afirma, ya soñando con las asistencias que le puede dar el zurdito alemán, otra de las gratas sorpresas que dio Sudáfrica-2010 junto a su compinche, Thomas Müller.