La futura intendenta de Montevideo promete despedir a decenas de sus camaradas con cargos de especial confianza

Bajo el estimulante título "Ana atómica: la nueva intendente hará volar cargos de confianza y no dará cuartel a la basura y al transporte", el diario oficialista La República titula hoy en su portada un informe sobre los lineamientos de trabajo de la futura intendenta de Montevideo. Que Olivera (Ana para el diario) diga que se procupará por la basura y el transporte de la capital  no es novedoso. Todos los alcaldes dijeron lo mismo en los últimos 50 años. Lo que sí resulta espectacularmente llamativo es que "hará volar cargos de confianza". Se deduce de esta última propuesta que la señora echará a la calle a decenas de personas contratadas por la izquierda uruguaya en las últimas dédadas. Ni el Partido Nacional ni el Colorado tuvieron nada que ver en esas contrataciones. En buen romance, va a despedir a sus propios compañeros, a menos que queden funcionarios de 85 o 90 años aún cumpliendo tareas. Daría la impresión de que se trata una bravata de la señora. Habrá que esperar, pues, a ver qué hace. Si echa a decenas de compañeros suyos la cosa se va a poner buena. He aquí el vasto informe del diario de izquierda: "La intendenta electa Ana Olivera comenzó a delinear, a través de la conformación de tres comisiones especiales, lo que será su gestión en la IMM. Sus pilares serán consolidar gradualmente las funciones de los municipios, lo que implicará la   eliminación de más de una decena de cargos políticos en la Intendencia, y fortalecer las políticas de limpieza y transporte. Esta semana, comenzaron a funcionar tres comisiónes especiales, formadas a iniciativa de la intendenta electa Ana Olivera, para empezar a analizar una nueva reestructura y organigrama que tendrá la Intendencia Municipal de Montevideo, en base a la creación de los 8 municipios. Por lo tanto, en este proceso de transición, la fuerza política y actuales autoridades municipales deberán definir las transferencias de funciones de la órbita departamental a la municipal, y los cambios que por esta consecuencia deberán implementarse en la estructura de la IMM. Las otras dos comisiónes, se abocarán a elaborar una propuesta de mejora del sistema de limpieza para la ciudad, tanto en el corto, como en el mediano y largo plazo, y de transporte para la capital.
Así también, la nueva administración, procurará plasmar en el gobierno uno de los puntos prioritarios en el programa departamental del FA, referida a las políticas de tierras de la comuna. Si bien no es competencia del gobierno departamental las políticas de vivienda, se consideró necesario hacer un acompañamiento, efectuando un direccionamiento de la cartera de vivienda de la IMM.
No obstante, la aplicación del tercer nivel de gobierno, las alcaldías, repercutirá en la eliminación de cargos políticos a nivel de la intendencia montevideana. Desaparecerán los 18 cargos políticos de las Juntas Locales, que tienen un sueldo equivalente al de director de división, por 8 cargos de alcaldes. Se está analizando en la interna del Frente Amplio la firme posibilidad de que desaparezca el Departamento de Descentralización, con la consecuente baja del respectivo director del departamento y director de las divisiones de las regiones Centro, Este y Oeste.
Incluso, extraoficialmente se maneja como posibilidad que la reestructura en la IMM incluya más modificaciones en departamentos, divisiones y secretarías, con lo cual, podrían disminuir aún más los cargos políticos.
El MPP tiene la postura de efectuar una reestructura a fondo en el organigrama de la comuna, y es partidario de unificar en un nuevo departamento alguna de las funciones que actualmente desempeña el Departamento de Acondicionamiento Urbano, referida a la movilidad urbana con las de Vialidad.
No obstante, otros sectores del FA no están a fin a este planteo, pero sí de hacer un rediseño del mismo. También el MPP es partidario de que la IMM funcione a través de gabinetes sectoriales, divididos en tres áreas: planificación, servicios internos y área operativa.
Se prevé que puedan existir un gabinete entre la intendenta y los ocho alcaldes, otro gabinete entre la intendenta y los directores municipales y un tercero, con todos estos actores.
Transferencia de funciones
En la reunión desarrollada ayer de la Comisión de Reestructura y Organigrama, participaron la intendenta electa, Ana Olivera, sus respectivos suplentes, los integrantes del gabinete de Transformación de la IMM, y representantes de los sectores políticos del FA.
En esta primera instancia, comenzó la tarea de elaborar un nuevo diseño en la intendencia, y definir los primeros ejes del gobierno departamental, centralizados en un plan de movilidad urbana, y medidas concretas para el tema de la limpieza.
La intención de la fuerza política es acompañar el proceso de los municipios con una transferencia progresiva de funciones.
Para los primeros meses, las alcaldías se harían cargo de las tareas de barrido, bacheo móvil, cuidado de espacios públicos y verdes, el mantenimiento del alumbrado básico en los barrios, la poda y transferencias muy específicas, como podría ser en lo cultural, la administración de la Sala Verdi, o la inspección en ferias vecinales.
Por su parte, la Intendencia continuará realizando las nuevas obras, el alumbrado central en las avenidas y el mantenimiento de los grandes parques. Según se dijo, la intención es no hacer una transferencia total de funciones, a fin de que los concejos municipales puedan cumplir exitosamente la tarea. Recién en enero de 2011 estará el nuevo presupuesto que facilitará la gestión.
Actualmente, la fuerza política está analizando la posibilidad de contar con funciones compartidas entre la IMM y los municipios, como por ejemplo en las políticas sociales.
En tanto, los municipios estarán elaborando su Plan de Desarrollo Municipal, a través del aporte que efectúen los alcaldes y concejales, en consulta con los Centros Comunales Zonales, los cabildos y las organizaciones sociales.
Planta de tratamiento
La intendenta electa, Ana Olivera, conformó la comisión de limpieza, integrada por personas que están o estuvieron directamente relacionadas con este tema en la IMM. El propósito es elaborar un diagnóstico de la situación y unificar propuestas de solución a los problemas en el corto, mediano y largo plazo.
En tal sentido, existen distintas miradas respecto al problema y se pretende alcanzar una herramienta para solucionarlo y dejar un insumo para las próximas autoridades de la IMM y una hoja de ruta que utilice Olivera en su gestión.
El plan de emergencia en la temática de la limpieza se deberá adoptar con el actual marco presupuestal y funcional actual.
La administración Olivera heredará el proyecto de construcción de un nuevo sitio de disposición final, que se ubicará en la zona contigua al de Felipe Cardozo.
Está en marcha un proceso licitatorio para definir el nuevo vertedero que contendrá la impermeabilización del suelo, obras de canalización de los líquidos emanados de los residuos, la captura del gas proveniente de los desechos, una planta de tratamiento lixiviados, y el envío de estos líquidos, a través de un sistema de bombeo a la red de saneamiento.
Actualmente, los líquidos que salen de los residuos no son tratados previamente y dan a la cuenca del arroyo Carrasco. La obra estará finalizando a mediados de 2011, con una inversión mínima de U$S 4 millones. A finales de año ya se podrá depositar los residuos en este nuevo predio.
No obstante, desde el FA se es consciente de que se trata de una solución que se hará realidad de 4 a 6 años, y que el tema de fondo debe solucionarse con un sitio de disposición final que incluya al área metropolitana.
Se maneja también incluir una política educativa en el tema limpieza, buscando un cambio en el comportamiento de la sociedad, acompañado por una acción punitiva del Estado, marcando los límites".