El Banco Central publica las deudas de la mitad de los ciudadanos uruguayos activos como si fueran delincuentes
El Banco Central publicó los datos de créditos y otras obligaciones que tienen 540.000 deudores entre empresas y personas con los bancos. La medida genera polémica entre los que la aprueban y quienes dicen que viola la confidencialidad. Jorge se enteró que debe más de US$ 7.000 por una garantía ejecutada. Rosina detectó que en abril del año pasado debía $ 52.000 a un banco cuando nunca operó con éste. Alberto vio la web y corroboró lo que debe pero Marcelo aprovechó las boletas que tenía de servicios públicos y supermercados -en donde consta el RUT- y constató las deudas que tiene UTE (con calificación de riesgo de 2A y 1C) y Antel (calificada en 1C) entre otras empresas privadas. Esos son algunos de los datos que se pueden encontrar a través de la página web del Banco Central desde el miércoles ingresando al link de la Central de Riesgos para Consulta de Deuda (https://consultadeuda.bcu.gub.uy/consultadeuda). El presidente del Banco Central, Mario Bergara, informó que se trata de los datos de alrededor de 540.000 deudores enviados por las instituciones de intermediación financiera a la autoridad monetaria. La base abarca datos de bancos, casas financieras y la cooperativa Fucerep. Sólo están publicados los datos de deudas a partir de los US$ 2.000 salvo que el cliente del crédito sea moroso reiterado o se considere una deuda incobrable para los cuales los bancos tienen la obligación de publicar la información, por lo que podría figurar una deuda inferior a los US$ 2.000. La información, según dijeron a El País en la Central de Riesgos, incluye deudas vinculadas a préstamos que no se están pagando, que se están cancelando y aquellas vinculadas a las tarjetas de crédito, dado que para estas el banco debe constituir ciertas previsiones. Hay información consolidada de riesgos de clientes, de conjuntos económicos, deudores con operaciones contabilizadas en cuentas de morosos o subcuentas de créditos castigados.
La publicación de los datos ya provocó las dudas de varios clientes que han llamado a la Central de Riesgo consultando dudas sobre los registros, según dijeron en la propia oficina a El País. En este sentido, el Banco Central piensa publicar un instructivo en los próximos días. Incluso surgieron consultas en los propios bancos.
Para hacer las consultas en la página web hace falta tener el número de cédula de identidad, el Registro Único de Contribuyentes, el correlativo de persona jurídica, documento de seguridad social, identificación registral, pasaporte o número de hipoteca para deudores del Banco Hipotecario. Una vez ingresado se accede a un cuadro con lo adeudado a todo el sistema y la apertura por institución y por moneda.
Si bien desde algunos frentes se considera beneficiosa la publicación de la información hay quienes la cuestionan por ir en contra del deber de confidencialidad.
El presidente del Banco Central, Mario Bergara, aclaró que la medida no viola el secreto bancario en tanto este "solo alcanza a los depósitos", según dijo en una conferencia de prensa el martes al anunciar la capitalización de la institución.
En esta línea, el socio de Guyer & Regules, Juan Manuel Albacete, dijo a El País que "el secreto bancario rige plenamente". De todas formas, aclaró que "no parece cumplirse el deber genérico de confidencialidad" ya que "es dudoso que los datos se puedan publicar masivamente con ese nivel de detalle".
Albacete sostuvo que recibió la "inquietud" de "varios clientes preocupados por el alcance de la información" ya que entienden, según relató, que puede provocar que se considere que una persona opere probablemente con el mismo banco con el que tiene un crédito así como que da pie a "hurgar" en la información de personas sin ningún motivo evidente.
El presidente de la Cámara de Comercio, Alfonso Varela, dijo que "es algo desacertado desde el punto de vista jurídico. Esta resolución tiene muchos visos de ilegalidad y vulnera derechos establecidos en la Constitución (...) Veo una contradicción entre esta resolución y la ley de Habeas Data que protege la intimidad de los ciudadanos y que entiende que esa intimidad es un derecho". El mismo argumento fue expuesto por otros consultados que no quisieron hacer comentarios hasta no analizar la ley.
Entrevistado por Cierre de Jornada de Sarandí, Varela agregó que "hay una contradicción con normas constitucionales que hacen a la privacidad, a la propiedad privada, porque todo lo que gira alrededor de un crédito implica un derecho de propiedad. Una central de riesgo del Banco Central es para los bancos, no para abrirlo a Dios y a todo el mundo". Varela se mostró preocupado porque la publicación de datos "puede servir para causarle enormes problemas a diferentes empresas. Puede servir para que gente de mala fe y con malas intenciones perjudique a mucha gente".
En contrapartida, el director de la Liga de Defensa Comercial, Bernardo Quesada, sostuvo que "lo vemos muy bien" ya que "teníamos una resolución del TCA de que el Banco Central tenía que entregarnos la información, pero si accedíamos solo nosotros podría quedar fuera el que no es socio".
Quesada afirmó que "no es (información) masiva, es una consulta uno a uno" y que el objetivo es que "el mercado conozca el nivel de endeudamiento de personas y empresas para evaluar las condiciones a la hora del comercio".
"En algunos casos quizás haya que explicar qué significa la información que está ahí. Hay que entender las calificaciones que los bancos hacen de sus clientes, porque tienen dos componentes. Uno objetivo que es el atraso en el pago de la deuda y otro que es subjetivo que tiene que ver con la presentación en plazo de balances, cuánto afecta a una empresa la variación del dólar, etc.", agregó. "Esta información en Argentina se brinda públicamente hace tiempo y no hay inconvenientes. Quizás hay que hacer un seguimiento de cómo se usa la información", remató.
En los hechos, la ley 17.498 aprobada en 2006 facultó al BCU a divulgar "datos personales relativos al cumplimiento o incumplimiento de obligaciones de carácter comercial o crediticia que permitan evaluar la concertación de negocios en general, la conducta comercial o la capacidad de pago del titular de los datos, en los casos en que los mismos sean obtenidos de fuentes de acceso público o procedentes de informaciones facilitadas por el acreedor".
Central de balances
Para el especialista en temas financieros y contables de CPA / Ferrere, Bruno Gili, la posibilidad de acceder a datos de la Central de Riesgos del BCU es algo "bueno" y "democratizador" porque "la gente no sabía como la calificaban las instituciones".
Gili dijo a El País que es necesario ir hacia una mayor transparencia que la que se logra con esto.
En ese sentido, manifestó que sería deseable que hubiera una Central de Balances de empresas, ya que hoy una ley exige que a partir de determinados montos hay que presentar un balance a la Auditoría Interna de la Nación pero muchas firmas no lo cumplen.
Gili afirmó que las empresas deben presentar balances a los bancos a la hora de pedir un crédito, deben hacerlos públicos si cotizan en Bolsa o deben presentarlo al Estado si quieren acceder a beneficios fiscales por hacer una inversión. Una Central de Balances le evitaría a las empresas esos "costos transaccionales", además de proporcionar "información de calidad", lo que hoy no ocurre. La transparencia de este tipo de información "debería mejorar la asignación de recursos en la economía", aseguró.
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Blanca Alzogaray -