Insólito en Uruguay: hay clamor popular para que se suspenda el partido entre Nacional y Peñarol

Los comerciantes de la Unión, Belvedere, del Centro de Montevideo y de los shoppings dieron cuenta de su malestar por el paro sorpresivo decretado por los transportistas de Montevideo para mañana sábado, en protesta por los incidentes que se vienen registrando contras las unidades y sus responsables. Los comerciantes entienden que el partido clásivo moviliza una multitud, pero asimismo al no haber transporte no permite el traslado a miles de potenciales clientes justo un día antes del Día de la Madre, cuando las ventas se disparan. La Cámara de Comercio hizo saber de la inquietud al Ministerio del Interior y a la AUF para que el partido de mañana sea suspendido. El propio presidente de la empresa Cutcsa, Juan Salgado, se sorprendió al enterarse esta tarde de la decisión del sindicato de trabajadores del transporte de paralizar los servicios este sábado a causa de la violencia contra las unidades que se registran luego de los encuentros entre Peñarol y Nacional. El empresario dijo compartir la preocupación de los trabajadores, pero consideró que la medida genera “descontrol” y que “es una desmesura”. Salgado dijo que se deberían acabar otros caminos para encontrar soluciones antes de parar, y perjudicar a toda la población de Montevideo. Para Salgado la primera medida ante la situación planteada sería “suspender el partido”, y para eso, tiene previsto comunicarse con el ministro del Interior, Eduardo Bonomi. “Cutcsa no escapa de esto, en el último clásico se dañaron más de 20 unidades, pero para solucionarlo tenemos que involucrar a todas las partes”, declaró el titular de la empresa de transporte. Otra solución inmediata que plantea Salgado es jugar el partido a puertas cerradas. De todos modos, Salgado aseguró que de prosperar la medida de paro Cutcsa ofrecerá servicios de emergencia, no solo para el partido clásico, sino para toda la población. No obstante , los comerciantes estiman que la solución propuesta por Salgado es insuficiente para que una importante cantidad de gente pueda trasladarse a los lugares preferidos para realizar sus compras. Sin perjuicio de ello, el ministro del Interior, Bonomi, adelantó que el partido "se jugará igual", dando luego una serie de explicaciones filosóficas de pobre textura.