Investigan a obispo alemán por abusos a menores

Las autoridades alemanas informaron el viernes que se ha abierto una investigación preliminar contra el obispo de Augsburgo, Walter Mixa, quien enfrenta acusaciones de abusar físicamente de menores y quien ofreció al papa Benedicto XVI su renuncia el mes pasado. El diario Augsburger Allgemeine informó que los fiscales de Ingolstadt han abierto la investigación preliminar sobre Mixa, por un cargo de abuso sexual, el cual data de la época en que estuvo en la diócesis de Eichstaett, entre 1996 y el 2005. La diócesis de Augsburgo confirmó en un comunicado que había "entregado información (que involucra al obispo) a la autoridad responsable", pero la portavoz Kathi Marie Ulrich rechazó dar detalles al respecto.
Stefanie Ruhwinkel, vocera del Ministerio de Justicia de Bavaria, señaló que se inició una investigación preliminar contra Mixa, pero tampoco abundó en el asunto. Los fiscales en Ingolstadt no respondieron el viernes las llamadas de la AP y no fue posible tener comunicación con Mixa para que diera declaraciones.
Gerhard Decker, abogado de Mixa, dijo al periódico que su cliente "niega resueltamente" las acusaciones. Decker no respondió el viernes llamadas de la AP buscando más comentarios.
El obispo no ha tenido apariciones públicas desde que escribió una carta al Papa el 21 de abril, ofreciendo su renuncia. Dijo en la misiva que esperaba que la medida permitiría a la diócesis un "nuevo comienzo" y ofreció cooperar plenamente con los investigadores.
Los medios informativos alemanes reportaron el viernes que Benedicto XVI había aceptado la renuncia, pero el sacerdote Federico Lombardi, vocero del Vaticano, señaló que no confirmaría ni negaría los reportes.
Los anuncios sobre aceptación de renuncias de obispos por parte del Papa son publicados en el boletín diario de la Santa Sede y nunca se difunden antes de ese paso, dijo Lombardi. El siguiente boletín será publicado el sábado.
Benedicto XVI nombró a Mixa para encabezar la diócesis de Augsburgo en julio del 2005, poco después de asumir el pontificado.
Las acusaciones de que Mixa golpeó a niños cuando era sacerdote hace décadas surgieron a principios de este año. Inicialmente negó haber utilizado la violencia contra muchachos, durante una entrevista televisada, pero bajo presión intensa admitió varias semanas después que pudo haber abofeteado niños hace años.