Reapareció Elián González, el chico que hace una década fue eje de una pulseada entre Cuba y EE.UU.

Elián González se convirtió en un adolescente de cabello corto, que estudia en una escuela militar y es delegado de la juventud comunista, diez años después de haber sido el centro de una disputa jurídica y política entre Cuba y Estados Unidos. El portal de internet oficialista Cubadebate mostró fotos del joven durante el 9no. Congreso de la Unión de Jóvenes Comunistas, desarrollado el fin de semana en la capital cubana.
González, de 16 años, pocas veces sale en público y en esta ocasión lo hizo entre los delegados a la reunión partidaria vestido con el uniforme verde olivo que caracteriza a los estudiantes de las escuelas preuniversitarias militares isleñas. De rostro alargado, cabello negro y mirada atenta, el joven se ve serio y sentado entre sus correligionarios. "Elián González, diez años después", se tituló el fotorreportaje que mostró Cubadebate.
El lente muestra "esa imagen que marchó por el mundo exigiendo justicia, esa mirada que cautivó al padre, al abuelo, a las madres a las familias norteamericanas a la señora (Fiscal General Janet) Reno, para dictar sentencia y decidir que estos ojos regresaran a su hogar", expresó un escueto texto que acompañó a las fotos. "Hoy una década después, encontramos a estos mismos ojos debatiendo entre jóvenes como hacer revolución", agregó.
"Compartió en el cónclave de los jóvenes cubanos las ideas, motivaciones y la búsqueda de soluciones de cómo hacer Revolución, bajo el legado martiano defendido por los cubanos bajo la guía de Fidel" Castro, comentó Radio Baraguá, una emisora local que también reportó la presencia de Elián González. La clausura del congreso, ayer por la noche, estuvo a cargo del actual presidente Raúl Castro.
Siendo apenas un niño, Elián fue sacado ilegalmente por su madre hacia Estados Unidos pero la embarcación naufragó. El menor sobrevivió milagrosamente y los pescadores que lo rescataron llevaron a La Florida.
Su padre, Juan Miguel González, reclamó su devolución y pidió ayuda al entonces presidente Fidel Castro derivando en un enfrentamiento entre Cuba y grupos anticastristas que se negaban a entregarlo.
Durante un proceso legal en Estados Unidos, su padre -que ratificó su deseo de volver a la isla con su hijo- recobró la patria potestad pero sus parientes se negaban a regresar al menor a su padre. Las autoridades debieron usar la fuerza.