Gritar "judío hijo de puta" o "Hitler tendría que haberlos matado a todos" está bien para la justicia argentina

Expresiones como "judío hijo de puta" o "Hitler tendría que haberlos matado a todos" no implican odio racial sino apenas "una expresión de descontento", según el fallo de un tribunal argentino difundido este miércoles.
La Sala I de la Cámara Federal de la capital argentina señaló que esos insultos no responden a la figura de persecución u odio racial sino a "amenazas", al pronunciarse sobre una denuncia de un hombre de origen judío que dijo haber sido agraviado con esas expresiones al discutir con otro por cuestiones comerciales.
"Vos sos un judío hijo de puta, te voy a matar. Sos un 'garca' (traidor) igual que tu familia y todos los judíos. Hitler los tendría que haber matado a todos ustedes. No me importa nada, total salgo en seis meses por emoción violenta", sostuvo el agresor, de acuerdo con el denunciante citado por la prensa.
"El contenido de las frases proferidas, por más repudiable que sea, representó un modo, por cierto poco feliz, de exteriorizar el descontento devenido de relaciones comerciales y se enmarcó, en verdad, en una eventual amenaza", indicó el fallo.
Julio Schlosser, dirigente de la colectividad judía, dijo que el fallo "más que sorpresa, causa preocupación porque no le hace nada bien a la convivencia pacífica" y sostuvo que esa clase de expresiones "llevan una carga de antisemitismo".
"La expresión de insultos o agravios de contenido discriminatorio constituyen en sí mismos un acto discriminatorio", dijo el titular del Instituto Nacional contra la Discriminación, Claudio Morgado, al repudiar la decisión judicial.
El tribunal se pronunció en una cuestión de competencia entre la justicia federal y ordinaria y esta última instancia deberá expedirse sobre el delito de amenazas.
En las últimas semanas, han aparecido leyendas antisemitas en cementerios judíos, en los que también se profanaron varias tumbas.
La colectividad judía de Argentina es la más numerosa de América Latina, integrada por unas 300.000 personas.