"Las Malvinas son nuestras", protestan los argentinos

Ocho de cada diez argentinos cree que la presencia británica en las islas Malvinas constituye una violación a la soberanía de Argentina, aunque muchos están dispuestos a considerar la posibilidad de una soberanía compartida, de acuerdo con un sondeo privado difundido hoy. Según una encuesta de la consultora privada Ibarómetro, el 79,3 por ciento de los argentinos cree que la cuestión de las Malvinas, que llevó a Argentina y al Reino Unido a una guerra en 1982, es un asunto "importante" para su país.
"Un dato significativo es que entre los más jóvenes el promedio de los que consideran esta cuestión muy o bastante importante está por sobre la media, lo cual expresa su permanencia entre los temas de interés público", dijo Leonardo Hekimian, profesor de Política Exterior de la Universidad Católica Argentina, que analizó los resultados del sondeo a pedido de la consultora.
La encuesta revela una alta valoración de la acción diplomática como medio para recuperar la soberanía del archipiélago y un importante rechazo a cualquier acción bélica.
En este sentido, siete de cada diez apoya las acciones diplomáticas de Argentina en foros internacionales y regionales, mientras un 11,8 por ciento prefiere acciones políticas y económicas para presionar al Reino Unido a negociar la soberanía y sólo un 3,2 por ciento opta por una ocupación bélica de las islas.
De hecho, un 52,8 por ciento de los entrevistados se mostró en desacuerdo con la recuperación militar argentina de las Malvinas en 1982.
Un 44,3 por ciento de los consultados ve como algo positivo que el Gobierno argentino sostenga una actitud de "insistencia" en sus reclamos de soberanía en los foros internacionales.
Tres de cada diez entrevistados cree que en el futuro el Reino Unido y Argentina compartirán la soberanía de las islas, mientras que un 25 por ciento cree que el país suramericano recuperará el dominio de las Malvinas y sólo un 15,9 sostiene que los "kelpers" (isleños que habitan esa región) formarán un país independiente.
Consultados sobre la posibilidad de una soberanía compartida, un 41 por ciento de los entrevistados la consideró como un paso para la obtención final de la soberanía argentina, mientras que casi un 30 por ciento dijo que esa opción es "inaceptable" y un 18,9 por ciento la ve como "lo máximo que Argentina puede conseguir".
"De afirmarse la tendencia que admite algún grado de soberanía compartida, esto podría dar a los sucesivos gobiernos argentinos una carta de negociación que no se ha explorado desde el fin de la guerra de 1982 hasta el presente", destacó Hekimian.