La culpa es del gobierno
El principio de autoridad es algo muy caro para un gobierno que se precie de tal. En el caso de la custodia de los menores infractores ha fallado estrepitosamente. En los últimos tiempos los funcionarios del Inau se han dado el lujo de no recibir a los menores remitidos a los hogares de contención por orden judicial. Ello derivó en una medida de urgencia y deplorable: tuvieron que ser repartidos y encerrados en distinas comisarías. Una de las seccionales policiales estuvo a punto de sucumbir al fuego prendido por dos de los infractores. La situación era de tal gravedad que el gobierno resolvió decretar servicio de esencialidad, lo cual puso los pelos de punta a los funcionarios. Entonces en una reunión en el Ministerio de Trabajo se "llegó a un acuerdo" y los trabajadores del Inau se comprometieron a recibir a los menores. En contrapartida, el gobierno retiró el decreto que tuvo una duración de un día. Craso error y "Causa Abierta" así lo advirtió. Pues bien, hoy los funcionarios anunciaron que se van al paro el próximo 11 de junio y que marcharán hasta la sede central del Inau para exigir la renuncia del directorio. Que la señora Nora Castro, su presidenta, no calce los puntos para dicho cargo, rompe los ojos. Pero más allá de ello, resulta increíble que horas después del "pacto de caballeros", los funcionarios vuelvan a la guerra porque el gobierno ha tenido "un tono represivo, como lo fue el decreto de esencialidad, usado por el gobierno -por unas horas- como un elemento de presión, y no como una herramienta constitucional. Estos son, entonces, las consecuencias de un proceder que demostró debilidad del ejecutivo. Los menores infractores muertos de risas y los que no lo son, miran...
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