Dolor en España por la muerte del escritor leonés Antonio Pereira

El escritor leonés Antonio Pereira, considerado como uno de los mejores autores de relatos de la segunda mitad del siglo XX, falleció ayer por la mañana en su domicilio de León a los 85 años de edad, como consecuencia de un paro cardiaco, según informaron fuentes de la familia. Antonio Pereira había nacido el 13 de junio de 1923 en Villafranca del Bierzo. El autor de 'Cuentos de la Cábila' trasladó su residencia a la capital leonesa a mediados del pasado siglo, aunque durante los últimos años de su vida alternó esa residencia con frecuentes y prolongadas estancias en Madrid. En el momento de su fallecimiento, inesperado a pesar de que sufría una delicada salud desde hacía tiempo, se encontraba junto a su esposa, Úrsula Rodríguez. La capilla ardiente se instaló en el tanatorio de Eras de Renueva en la capital leones, en el que durante todo el día de ayer fueron incesantes las visitas de familaires, amigos y admiradores de su literatura. La familia tenía previsto incinerar el cadáver del escritor para trasladar las cenizas mañana a su municipio natal. Aunque se inició en la letras dentro de la poesía y es autor de dos novelas ('País de los Losada' y 'Un sitio para Soledad'), la obra literaria de Pereira se centró en el relato breve. Inauguró esta faceta en 1966 con la publicación de 'Una ventana a la carretera', con el que obtuvo el Premio Leopoldo Alas. Galardonado en 1988 con el Premio Fastenrath de la Academia de la Lengua y en 1999 con el Castilla y León de las Letras, el escritor leonés ocupa un lugar importante en la narrativa de la segunda mitad del siglo XX. Entre sus títulos destacados figuran 'El síndrome de Estocolmo', 'Cuentos para lectores cómplices', 'Picassos en el desván', 'Relatos de andar el mundo'. 'Obdulia, un cuento cruel', 'Oficio de volar' o 'cuentos de noroeste mágico'.

Fundación

Entre sus libros de poesía, destacan 'El regreso', publicado en 1964, 'Del monte y los caminos', editado de 1966, 'Cancionero de Sagres' de 1969, 'Dibujo de figura' y 'Contar y seguir', en 1972. Recientemente recopiló su obra poética en un volumen titulado 'Meteoros', que recoge su obra desde 1972 hasta el 2006. El año pasado se constituyó en la capital leonesa la Fundación Antonio Pereira, impulsada por él y su esposa. Su objetivo es fomentar y promover todo tipo de actividades de carácter científico y cultural o de interés social, tendentes a la conservación de la obra literaria del escritor, así como de cualquier otra obra relacionada, tanto de literatura, artes como humanidades. El coordinador de la Fundación, José Enrique Martínez, catedrático de teoría de la Literatura en la Universidad de León, manifestó ayer que el escritor ha otorgado al «cuento de una especie de estabilidad y de interés para todos», con la «cercanía» de la que le dotó, además de ese «humor benevolente». Martínez añadió que el escritor era «muy humano, cariñoso y muy amigo de sus amigos». «Tenía un tono de gracia y de humor muy característico», siempre benevolente, «de manera que la conversación con él era como un buen banquete intelectual». La Fundación no tiene aún sede definitiva y se estaba a la espera de que Pereira visitara la biblioteca central de la Universidad de León, pues se proyectaba ubicarla allí. El Ayuntamiento de Villafranca del Bierzo (León), localidad natal del escritor, declaró ayer tres días de luto oficial por su fallecimiento. El alcalde, Agustín García Millán, recordó que Pereira «cantó a Villafranca como poeta» y que tanto el resto de su literatura como su ironía «parten de aquí». «Los villafranquinos estamos de luto por su pérdida, pero su legado supone algo muy importante para todos», explicó el alcade. Pereira era hijo predilecto y cronista de su villa natal. Entre sus distinciones estaba el doctorado honoris causa de la Universidad de León. (El Norte de Castilla)