Evitar a los hombres, uno de los secretos de su longevidad dice mujer de 109 años
Vive en un asilo de ancianos en Aberdeen (Escocia) y sonríe cuando las cámaras van a sacarle fotos. Se la ve charlando con una amiga o sentada mientras de fondo el jardín verde asoma.
Jessie nunca se casó, y nació en una pequeña casa de campo con cinco hermanas y un hermano. A los 13 dejó la casa familiar para convertirse en una ordeñadora de vacas. Una vida sencilla y nutrida de experiencias de la naturaleza la avala, sus 109 años florecieron en la estación invernal del hemisferio norte.
“Mi secreto para una larga vida fue mantenerme lejos de los hombres. Dan mucho trabajo para lo que valen”, afirma Jessie, quien nunca se casó ni tuvo hijos. “Me aseguro de hacer mucho ejercicio y comer un plato lleno de avena tibia todas las mañanas”.
Las teorías, estudios y debates acerca de que estar en pareja alargan la edad y previenen enfermedades son rebatidos por la experiencia de esta anciana, quien eligió estar bien lejos de las tareas hogareñas, pero no rechazó otros tipos de afecto.
“Siempre trabajé fuerte y raramente me tomé vacaciones. Dejé mi casa a los 13 para irme a ordeñar vacas, siempre tuve muy buenos trabajos y estuve rodeada de buenas personas”.
Va a conciertos y a la iglesia todos los domingos, mantiene un estilo de vida muy saludable. Lo que más la asombra: “es increíble ver lo cambiado que está el mundo desde que yo era niña”.
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