Frente Amplio estudia cómo contener a los diputados díscolos

En medio de acusaciones de falta de "ética" y de forzar las cosas adrede con la sola intención de obtener cargos públicos, el Frente Amplio inicia por estas horas una ardua negociación con los diputados rebeldes de la Liga Federal que decidieron abandonar los órganos de conducción de la coalición y dejaron de participar, provisoriamente, de la bancada de la izquierda.

Los diputados Darío Pérez y Sergio Mier habían recibido críticas varias por parte de sus compañeros luego de que desacataran la disciplina partidaria y votaran en contra de tres artículos del Presupuesto relativos al pasaje de la Policía Caminera a la Guardia Republicana, la supresión de 50% de las vacantes de las Fuerzas Armadas y la creación de una lotería deportiva.

Pero ayer de mañana durante la sesión de la Mesa Política del Frente Amplio los cuestionamientos tomaron una dimensión inesperada. "Lo de esta gente representa una clara falta de ética", dijo el representante del Partido Comunista Claudio Migliarini en relación a la decisión de ejercer una libertad de acción que no le fue otorgada.

En tanto, el representante del Partido Obrero Revolucionario (POR), Raúl Campanella, afirmó que la actitud de los legisladores de la Liga Federal estaba motivada por "la búsqueda de cargos".

Los cuestionamientos llegaron de todos lados pero los representantes de la Liga Federal no estaban para escucharlos.

La actitud de los parlamentarios -junto a la de Victor Semproni (lista 6009)- esta causando una creciente preocupación en el Frente Amplio puesto que condiciona las futuras votaciones en la Cámara de Diputados en donde la izquierda tiene los 50 parlamentarios justos para aprobar los proyectos.

Por eso, en estas horas los dirigentes de la coalición han descartado someter a los rebeldes a un Tribunal de Conducta Política y, por el contrario, se aprestan a abrir un ámbito de diálogo con Pérez y Mier para acercar posiciones, dijeron fuentes del FA a El Observador.

Si, al decir de la senadora Daniela Payseé (FLS), las "vocecitas díscolas" no se alinean con las de sus compañeros, el Frente Amplio tendrá problemas a corto plazo ya que el Senado quedará atado de manos para introducirle cambios al Presupuesto. Esto sucede porque el sistema legislativo establece que si la Cámara Alta cambia algunos de los incisos, el Presupuesto deberá volver a Diputados para que sea votado en bloque.

Si los diputados rebeldes se mantienen en su postura, el mensaje presupuestal irá a parar a la Asamblea General en donde, para su aprobación, se necesita una mayoría especial de la que el Frente Amplio carece.

En las pasadas elecciones nacionales, la Liga Federal obtuvo unos 60 mil votos que la dejaron al borde de lograr un senador.

El diputado Mier se quejó porque esos votos no se ven represetados en el gabinete de gobierno. "A veces pasa que el Poder Ejecutivo manda (al Parlamento) cosas muy difíciles de llevar pero como es el ministro de tal o cual sector se ve condicionado en su opinión o en su voto porque es su ministro. Como nosotros no tenemos ni portero...podemos entender esas cosas pero no las podemos llevar", declaró el jueves 15.

Luego agregó: "Si algún día tuviéramos un ministro -que nunca lo tuvimos ni lo estamos pidiendo- ni el ministro iba a ser mandatado por legisladores ni los legisladores por ministros. Y tenemos 60 mil votos, muchos más que cantidad de sectores que sí tienen ministros y subsecretarios".

Las cuestionadas estrategias de Semproni

El tercer diputado rebelde, Víctor Semproni (lista 6009), llegó a la Cámara Baja usando métodos que sus compañeros consideraron poco ortodoxos. En el Movimiento de Participación Popular (MPP) generó un gran enojo que Semproni no solo usara un número parecido al de ese sector (609) sino que confeccionara unas listas muy parecidas a las presentadas por el mujiquismo.

En las elecciones de mayo la lista de Semproni tuvo dos impugnaciones ante la Corte Electoral. Una del propio presidente Tabaré Vázquez para impedirle usar su imagen y otra de todo el Frente Amplio luego de que el legislador incumpliera un compromiso preelectoral en las candidaturas a las alcaldías.