Blogia
CAUSA ABIERTA

Obispo de Salto por Amodio Pérez: “¿Sólo él es el malo de la película?”

Obispo de Salto por Amodio Pérez: “¿Sólo él es el malo de la película?”

El obispo de Salto monseñor Pablo Galimberti se refirió a Amodio Pérez, su presencia en el Uruguay, la relación con sus excompañeros del MLN-T y las reacciones que ha despertado.

También el religioso menciona al perdón y al perdonado que no sabe perdonar, según se publicó en una columna de opinión en el diario Cambio de Salto que recoge La República.

“¿Sólo él es ‘el malo de la película’?  ¿Qué margen de revisionismo existe dentro de los exintegrantes del MLN después de cuatro décadas? Es claro que algo o mucho cambió”, afirmó Galimberti en relación al exintegrante de la dirección del MLN-T.

Recordó que Amodio Pérez regresó al país después de 42 años y que “ha sido blanco de ráfagas de ametralladora (entiéndase bien: desprecios, denuncias, insultos, indiferencia…) por parte de sus excompañeros tupamaros”. Además, “lo ha citado también la división de Inteligencia para declarar ante la jueza penal, ya que fue señalado como colaborador de los militares por torturas contra expresas políticas”. Agrega que el relato del extupamaro enfrenta a la “historia oficial” que se ha contado sobre el MLN-T y que esto “suele costar caro”. Entiende oportuno mencionar que “la historia siempre se está releyendo, la propia y la general, como interpretación del pasado” y también que “siempre debe haber oportunidad para relecturas y nuevas miradas y búsquedas”.

Según Galimberti, Amodio Pérez “chocó contra el dogmatismo de una historia oficial o de algunas afirmaciones de la historiadora Clara Aldrighi acerca del proceso del grupo guerrillero”. Por otro lado, “negó haber entregado la ‘cárcel del pueblo’ y haber ‘marcado’ a ex compañeros para que fueran detenidos”.

Agregó el obispo, que Amodio Pérez “hizo afirmaciones claves sobre el grupo guerrillero, del que fue uno de sus fundadores” y “afirmó que ayudó a los militares ordenando los papeles que tenían sobre el MLN, para evitar que lo trasladaran hasta los calabozos donde estaban sus compañeros”. “Sabía que lo matarían, ya que lo acusaban – según él sin razón- por la entrega de la Cárcel del Pueblo”, afirmó Galimberti.

Para el religioso, a partir de sus dichos, “la intolerancia también se reavivó”. En otro orden, recordó la página evangélica del Evangelio de Mateo en la que “Jesús relata una parábola sobre el perdonado que no sabe perdonar”. “O sea -agrega Galimberti-, del que recibe el beneficio de una paz o reconciliación, pero es incapaz de extender a otros ese mismo beneficio”.

“Quien no perdona tampoco recibe perdón. Aborta un dinamismo social”. Por último, agrega Galimberti, “los dos relatos se me han cruzado. Si un día se juntaran, podrían quizás cerrar las heridas que aún duelen. Acéptenlo como un sueño”.

0 comentarios