Acusan al Rector de la Universidad Pública de Uruguay de "patrón, inflexible e insensible"

El discurso del rector “¿es para el gobierno o la sociedad?”, se preguntaron los funcionarios de la Universidad de la República agremiados en Affur, tras conocerse el monto que se solicitará al Parlamento para la Universidad de la República en el quinquenio. Criticaron la actitud de corte “patronal” e “inflexible e insensible” de Arocena. La discusión presupuestal trajo cola en la interna universitaria. La Agremiación Federal de Funcionarios de la Universidad de la República (Affur) además de efectuar un paro de 24 horas este martes, cuando se discutía en el Consejo Directivo Central (CDC) de la Udelar el mensaje presupuestal acorde a las necesidades del ente, lo aprobado por 16 votos en 20 fue catalogado de “insuficiente”. El monto a solicitar al Parlamento implica un incremento del 70% al presupuesto actual de $ 5.464 millones, alcanzando los $ 9.288 millones. Sin embargo, los funcionarios no docentes reclamaban $ 11.400 millones, a diferencia de los docentes que apoyaron la posición del rector, al igual que los decanos, a excepción del de Medicina, Fernando Tomassina, y la de Enfermería, Alicia Cabrera Puente, que tiene voz pero no voto, y los tres delegados estudiantiles. Dado que la resolución no contempla los reclamos de los trabajadores, mediante comunicado declaran que consideran que el “Sr. rector Arocena, actuando como líder y portavoz de una concepción a la interna de la Universidad, no defiende los intereses de un modelo de Universidad popular y democrática, y por el contrario avanza en un modelo de Universidad contrario a los intereses de los trabajadores y el pueblo todo”. Este concepto se basa, según los trabajadores, en que la Udelar “comenzó a discutir su pedido de incremento presupuestal de acuerdo a las necesidades que plantearon los distintos servicios universitarios, pero sin embargo la posición política liderada por el rector, a contrapelo del procedimiento utilizado inicialmente, fijó un tope máximo y obligó a reducir todos los proyectos planteados por los servicios, lo que sin lugar a dudas va afectar profundamente los proyectos de desarrollo que los distintos servicios universitarios se habían propuesto”.
Agregan que se utilizó como argumento el espacio fiscal restrictivo planteado por el Poder Ejecutivo. Este planteo parece tener como objetivo minimizar la confrontación con las pautas del Poder Ejecutivo, “pero se desatienden, sin embargo, las necesidades reales de los propios servicios universitarios, estableciendo además como principal variable de ajuste los salarios de los trabajadores, quienes, de consolidarse la propuesta de Rectorado, vamos a quedar con salarios sumergidos por cinco años más”. Por lo cual, los funcionarios rechazan “la actitud de corte patronal, asumida por el rector, absolutamente inflexible e insensible ante los planteos de los trabajadores, impidiendo con su actitud la posibilidad de llegar a un acuerdo”.
El dirigente de Affur, Luis Diosy, añadió: “Lo que más nos preocupa es el discurso que hace el rector hacia la sociedad, que somos todos los sindicatos, los trabajadores y los estudiantes, y nos preguntamos si ¿le habla directamente al gobierno o a la sociedad?, impidiendo el verdadero desarrollo de la Udelar en el interior o la atención de pacientes en el Hospital de Clínicas”. Por su parte, en su blog el rector Rodrigo Arocena escribió que el CDC “culminó una discusión prolongada, difícil y democrática. Varias propuestas apuntaban a solicitudes mayores. La solicitud para 2011 se aprobó por unanimidad; el incremento total del 70% se aprobó por mayoría”.