Bienestar Universitario enfrenta al Rector para evitar su desmantelamiento

Sorpresivamente, la Udelar solicitó una auditoría interna de la División Salud e inició una investigación administrativa para conocer los detalles del cumplimiento de funciones de médicos y administrativos. Funcionarios están de paro por reclamo de recursos. Si bien la investigación administrativa ya está en manos del Departamento de Jurídica de la Universidad de la República, aún resta recibir varios informes para conocer los detalles de cumplimiento de funciones de los médicos y administrativos de la División Universitaria de la Salud (DUS), que depende de Servicio Central de Bienestar Universitario (Scbu). La misma se inició al detectarse hechos irregulares como la ausencia de médicos en el departamento de certificación.
En tanto, la auditoría del mismo servicio, a cargo de la Dirección General de Auditoría Interna, implica estudiar la gestión en general, desde cuántas juntas médicas efectuó el servicio, además de las certificaciones y todos los procedimientos que se efectúan en el mismo.
Por su parte, los trabajadores de Bienestar Universitario se encuentran de paro por carencias de recursos en el servicio. Allí se ofrece becas económicas a estudiantes y/o boletos, comedor, y actividades culturales y deportivas, además de efectuar la certificación de salud de los funcionarios y estudiantes o certificado de aptitud funcional. Los funcionarios opinan que se quiere desmantelar Bienestar Universitario, como lo había denunciado la ex directora general, Cristina Rovira, removida de su cargo en el mes de diciembre tras varios enfrentamientos con el rector Arocena.
La paralización inició este martes por tiempo indeterminado. Además de la División Universitaria de Salud, en donde inició el conflicto, adhirieron los trabajadores de las oficinas que otorgan las becas, así como los trabajadores sociales que realizan un diagnóstico del estudiante, esto provocará un atraso en la tarea, pero no en quienes ya cuentan con las prestaciones que brinda todo el Scbu.
El conflicto se desencadenó en la DUS porque "cuando se debía abrir la oficina médica no había médicos para certificar, en ocasiones porque estaban de licencia anual o médica", explicó a Ultimas Noticias Manuel Menéndez, integrante de la gremial. Incluso este matutino pudo saber que muchos no iban, pero esa situación sumada a la carencia de personal es lo que hizo dar cuenta de la crisis institucional que atraviesa el servicio.
De todas formas, Menéndez enfatizó: "No queremos generalizar a todos los médicos porque muchos tienen un gran compromiso con la institución y son técnicos ejemplares a pesar de los menguados salarios, inferiores a los de Salud Pública".
La DUS cuenta con siete médicos, pero otros cinco fueron renunciando en los últimos años porque llegaban a la edad de jubilarse o para desempeñar otras tareas, pero nunca fueron repuestos. "Estamos viviendo un desmantelamiento del servicio", añadió Luis Diosy, secretario de organización de la Agremiación Federal de Funcionarios de la Universidad de la República (Affur). Al tiempo que "tampoco se define una política clara de todo Bienestar Universitario", acotó Menéndez.
Según el analista David Stein, consultado por "Causa Abierta", esta grave situación en un servicio esencial de la Universidad de la República "había sido denunciada y advertida en reiteradas oportunidades por la licenciada Cristina Rovira, quien hasta diciembre ocupó el cargo de directora general de Bienestar Universitario. Stein manifestó que "los continuos enfrentamientos entre Rovira y el director de la Dus, Dr. Jorge Venegas (hoy Subsecretario del MSP) culminaron con la separación del cargo del médico. Posteriormente Rovira mantuvo un agrio choque con el propio rector Rodrigo Arocena por cambiar el servicio de una buena vez. Pese a las protestas de Rovira por la inacción de la Universidad, Arocena cumplió el mandato de un grupo de la FEUU y con un CDC ajeno a lo que estaba pasando, se resolvió no renovar el cargo a Rovira como directora general, quedando el servicio acéfalo hasta el día de hoy.Y ahora estamos viendo las nefastas consecuencias con un servicio investigado, vapuleado y paralizado", enfatizó.
El departamento atiende unas 18.000 personas aproximadamente al año entre estudiantes, docentes y funcionarios. Sólo entre funcionarios docentes y no docentes el universo alcanza los 15.000 y los estudiantes 80.000.
Menéndez dijo que "hay problemas estructurales de fondo como la falta de recursos, además de varios cargos del organigrama vacantes tanto en estructura administrativa, como la profesional y de dirección". A la vez que preocupa que dentro del organigrama de la Universidad, al Scbu depender de oficinas centrales, "lo vuelve muy burocrático y enlentece la toma de decisiones". Al respecto Stein se mostró asombrado por los dichos de Menéndez, pues "él siempre supo, por vía directa con Rovira, que Bienestar nunca contó con recursos presupuestales, aunque llamativamente "en los papeles contables de la Udelar" presentados al CDC se informó que el SCBU recibía "las tres cuartas partes del presupuesto de la Udelar". Esa información manipulada groseramente fue utilizada en el CDC para apartar a Rovira", concluyó Stein.