Localizan el cuerpo del francotirador que consumó masacre en Inglaterra

La policía inglesa cree haber localizado el cadáver del francotirador que ha asesinado a tiros al menos a cuatro personas y ha herido a varias esta mañana en varias poblaciones de Cumbria, una zona rural del noroeste de Inglaterra, en el turístico Distrito de los Lagos. Se trataría de Derrick Bird, un taxista de 52 años, residente en Rowrah, cerca de Frizington (Cumbria). El cuerpo ha sido hallado en una zona boscosa cercana a la pequeña localidad de Boot, en el valle de Eksdale, una zona popular entre senderistas según informa el rotativo británico The Guardian. El primer ministro británico, David Cameron, ha confirmado en un comunicado que los fallecidos son cinco, incluido el agresor. Otras 25 personas habrían resultado heridas, según fuentes policiales. Un portavoz de la policía ha señalado: "Los agentes han encontrado un arma en el lugar y están trabajando para confirmar la identidad del fallecido y la cifra de personas heridas o muertas", según informa el rotativo The Independent. "Nuestro objetivo ahora es averiguar cuál es la causa de todo esto y dónde ha estado Bird durante las últimas 24 horas y especialmente en las últimas horas", ha indicado Stuart Hyde, subjefe de la policiía de Cumbria.
"La Cámara de los Comunes está alarmada y conmocionada ante los acontecimientos ocurridos en Cumbria esta mañana, en los que al menos cinco personas han muerto", ha dicho el jefe del Ejecutivo en su primera intervención en la sesión semanal de preguntas al primer ministro en el Parlamento. Cameron ha asegurado que el Gobierno "hará todo lo posible para ayudar a la comunidad local y a los afectados, y para mantener a la Cámara de los Comunes informada", antes de recordar a los familiares de los muertos y los heridos.
Tiroteo en Cumbria
El primer incidente se ha registrado hacia las 10.30 de la mañana (una hora más en la España peninsular), cuando un taxista ha sido atacado en Duke Street, en Whitehaven. El hombre ha huido en un Citroën Picasso de color gris oscuro. Una testigo ha señalado a Reuters que el tiroteo comenzó con una disputa entre taxistas. Lorraine Rimmer, que trabaja en la empresa de taxis Stirling, ha señalado que Bird disparó a tres taxistas tras una discusión. Mató a uno y otro tuvo que ser ingresado en cuidados intensivos. "Tuvieron una pelea con un taxista ayer por la mañana que duró hasta hoy. [Bird] perdió los papeles completamente", ha indicado Rimmer.
Tras el tiroteo inicial en Whitehaven, se han producido otros en las poblaciones de Seascale y Egremont. Después el agresor ha cambiado a un coche de color negro, según los testigos, y más tarde ha huido a pie a través de una zona boscosa cercana a la localidad de Boot, en el Distrito de los lagos, muy popular entre senderistas por su tranquilidad y su pintoresquismo. Hacia las 13.30, hora local, la policía ha pedido prudencia a los residentes para que no salieran de casa. Se desconoce si el hombre ha disparado a sus víctimas al azar o tenía algún objetivo concreto.
Alan Hannah, de 68 años, pudo ver al agresor, según ha explicado al diario The Whitehaven News en declaraciones reproducidas por The Guardian. "Cuando giraba justo al pasar la comisaría de policía vi a todos aquellos agentes de policía corriendo y me dí cuenta de que estaba pasando algo grave y me aparté para no obstruir el paso. Luego vi que venía un coche desde la izquierda y me paré en el semáforo. Vi a un hombre con una larga escopeta y con el cristal de la ventanilla roto. Me salté el semáforo y me metí en Lowther Street para salir de allí. Llegué a casa sano y salvo pero temblando".
Un suceso anómalo
Los tiroteos múltiples son anómalos en Reino Unido, donde existen estrictos controles sobre tenencia de armas. En 1996, un pistolero asesinó a 16 niños y a un maestro en la ciudad escocesa de Dunblane, y en 1987 otro individuo mató a tiros a 16 personas en la localidad de Hungerford, al sur de Inglaterra. La masacre de Dunblane condujo a una amnistía generalizada durante la que fueron recogidas cerca de 23.000 armas y se promulgaron nuevas leyes que prohibieron la tenencia de armas de fuego por parte de civiles e impuso que la posesión de otras armas requirieran un certificado policial.