Ana Olivera, una favorita con poco carisma

Cuando faltan 19 días para las elecciones municipales, en el Frente Amplio están leyendo con preocupación la intención de voto de su candidata en Montevideo, Ana Olivera, que pese a ser la gran favorita está unos quince puntos por debajo de la votación de la coalición de izquierda en 2005.
Los últimos sondeos de opinión ubican a la candidata del Frente Amplio, con una intención de voto de entre 45% y 48%, muy por debajo del 60% que obtuvo la candidatura de Ricardo Ehrlich. Ayer, el tema fue analizado por la Mesa Política del Frente Amplio, que acordó "trabajar más" en Montevideo en la recta final de la campaña. Esta situación no pasa inadvertida para los candidatos de la oposición. Ahora las encuestas indican que el Partido Nacional se plantó como la segunda fuerza en Montevideo y según uno de sus candidatos, Javier De Haedo, "ya no es imposible" la "utopía" de ganarle a la izquierda en la capital. De Haedo está convocando al voto de los otros partidos a fin de ganarle al Frente Amplio, lo que ha desatado una polémica con el líder colorado Pedro Bordaberry. De Haedo "perdió la línea" y lo que hace es un "manotón de ahogado", dijo Bordaberry. "Es un hombre que se pone muy nervioso en las campañas electorales, se ve que es nuevo, se desespera, ve que no le da y entonces sale a hacer estas cosas", agregó Bordaberry durante una recorrida por Treinta y Tres.