Chayanne pisará uvas en Argentina

Decir que el inversor puertorriqueño Elmer Figueroa, como fue inscripto al nacer, compró 30 hectáreas en el Valle de Uco para hacer su propio malbec no llamaría mucho más la atención de lo habitual para una noticia del estilo. Pero presentar a Chayanne, el seudónimo con el que se lo conoce en todo el mundo, como empresario que desembarca en el mundo del vino argentino con una finca que acaba de adquirir en San Carlos, termina por confirmar a Mendoza como el destino que cada vez atrae a más gente del espectáculo interesada en incursionar en el negocio.
El Cepillo es la localidad elegida y donde en un tiempo más empezarían los trabajos de implantación con el objetivo de producir a futuro vinos de exportación.
Aunque la confidencialidad impidió conocer la cifra exacta de la operación, en la zona una hectárea sin derecho a riego (la compra se habría cerrado hace un par de semanas en esas condiciones) tiene un costo que llega a los U$S 40.000, de lo que se desprende un desembolso superior al U$S 1 millón.
Ante la consulta de Los Andes, el profesional a cargo del proyecto, un ingeniero agrónomo experto en la producción de malbec, se aferró a la reserva del caso para no dar precisiones. "Hay una sociedad anónima y que yo sepa ningún cantante vinculado a la inversión", se limitó a decir antes de pedir reserva de su identidad.
El Cepillo es, junto con Altamira, una de las áreas vitivinícolas más buscadas de San Carlos. Si el emprendimiento desemboca, como se cree, en la construcción de una bodega de hasta 2 millones de litros, podría acogerse a un régimen impositivo diferencial con el que la Municipalidad de ese departamento busca captar inversiones cambio de estabilidad fiscal hasta diciembre de 2011.
Bodegas como O. Fournier, La Celia, La Abril (perteneciente a un inversor bursátil porteño) están, según el intendente Jorge Difonso, en la lista de beneficiarios.
"Significa pagar impuestos por $ 600 anuales, contra los $ 25.000 que como mínimo se imponen en otros departamentos vitivinícolas. Con esto buscamos que se genere empleo e incentivamos la producción. Y por esa diferencia evitamos las erogaciones para asistencia social", señaló Difonso.
Otro atractivo es la mejora en infraestructura: está en marcha el asfaltado de un tramo de 14 kilómetros, en el que participa un consorcio privado y se gestionan $10 millones en fondos nacionales para financiarlo.