El golero uruguayo Alexis Viera impacta a Colombia
"No he sido el mejor de todos, el partido lo ganó el plantel", dijo el arquero uruguayo, que salió figura en el triunfo 3-2 de América sobre Millonarios. El futbolista extranjero es centro de elogios. "América lo que más tiene es huevos", afirmó Viera con la emotividad que lo caracteriza. A pesar de que ya han pasado varias horas de la tarde inolvidable para él, aún se muestra efusivo y sus palabras están cargadas de emoción.
"El triunfo hay que dedicárselo primero a Dios, luego a mi familia que está pasando momentos difíciles junto conmigo, a mis compañeros con los que entramos a la cancha a dejar la vida, al cuerpo técnico y a toda la familia americana que es muy linda y grande", prosiguió Viera este domingo, un día después de haber tapados dos penaltis y de haber marcado un gol, de pena máxima, a favor de los 'Diablos rojos'.
No pesó la estrategia ni el orden táctico, pues prácticamente no lo hubo, pero se celebró como una victoria de un partido que pareció de finales y no de dos equipos en crisis en el ambiente del fútbol nacional.
A pesar de su destacada actuación, Alexis se mantiene con humildad y tranquilidad. Y como buen compañero que ha demostrado ser no cree que los tres puntos sumados el sábado fueron solamente por su aporte.
"El triunfo es de grupo, acá cada uno debe hacer su trabajo. Me tocó atajar todas las que pude y se ganó de la manera que se tenía que hacer: sufriendo y sobre el final. No jugamos bien, cometimos muchos errores pero debemos rescatar el triunfo que era lo que habíamos pedido a Dios", indicó el uruguayo.
Los penaltis atajados fueron la clave para mantener en la primera parte del duelo la ventaja y posteriormente para levantar el ánimo del equipo que conduce el profesor Juan Carlos Grueso. Ni siquiera el cambio de ejecutante de parte de los visitantes, el primer penati pateó Ulloque y el segundo Ramírez, consiguió vulnerar la valla americana. "En los penales fue un juego psicológico que hicimos con (Jorge) Banguero a los rivales, hablándole para sacarlos de concentración y lo logramos. Ya luego tuve la fortuna de escoger el lugar correcto".
Además de taparlos, Viera logró algo impensado por el desarrollo del juego: anotar desde el punto blanco. El jugador extranjero se llenó de confianza y con responsabilidad y carácter marcó en la puerta defendida por el uruguayo Juan Obelar.
"Para patear el penal había hablado con Sergio (Galván), para que me diera la confianza, ya que él está cerca de alcanzar el récord, lo pateé fuerte, sí lo atajaba le rompía la manos a Obelar, porque dejé todo en ese cobro para que entrara", explicó el guardameta.
Elocuentemente, fiel a su estilo, siguió comentando: "El partido valió tres puntos y lo ganó todo el plantel. Yo soy parte del grupo y colaboré con ese granito de arena".
Viera, como ya lo había hecho tras el partido frente a Tolima y durante casi toda la semana que antecedió al compromiso con Millonarios, volvió a rescatar el alto grado de compromiso del grupo actual de los escarlatas. Por eso reiteró: "Estar ahí y entrenar sabiendo las dificultades que vivimos en el equipo, todas las mañanas nos levantamos a darlo todo, mientras no sabes cómo quedan tus cosas en casa".
Los jugadores y cuerpo técnico recibieron parte de la taquilla del juego frente a Millonarios que es una "pequeña ayuda a la deuda", según indicó un directivo.
Pero Alexis Viera llamó a las autoridades de la región para que se acuerden de lo prometido: "Confío en la gente que dijo que colaboraría, el Gobernador (Juan Carlos Abadía) y el alcalde (Jorge Iván Ospina) que se pongan la mano en el corazón porque acá hay 40 ó 50 familias que viven de esto y después miles de seguidores que sienten América como una pasión".
Y finalizó el nuevo ídolo de los aficionados 'escarlatas' con su compromiso con el equipo, a pesar de haber anunciado su deseo de partir en pocos meses. "Yo dije en el partido anterior que en caso de que la la situación siguiera así en la parte económica, daré un paso al costado. No por Viera, sino por la familia de uno. Pero yo soy el capitán y no voy a bajarme del barco en plena competencia".
Después de la amplia charla, al guardameta lo esperaban otros periodistas en la línea. Hoy es el personaje del momento en el balompié nacional, más allá de que su equipo no se protagonista de primer plano en la tabla de posiciones. (El Tiempo)
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