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CAUSA ABIERTA

Descubren un gigantesco cráter en el corazón de África que tiene 145 millones de años

Descubren un gigantesco cráter en el corazón de África que tiene 145 millones de años

Estuvo escondido durante unos 145 millones de años. Pero una mezcla de tecnología y desastre medioambiental lo puso al descubierto. Un satélite logró fotografiar un escurridizo y gigantesco cráter ubicado en el corazón de África y vio la luz gracias a la terrible deforestación que vive el continente.
El agujero tiene entre 36 y 46 kilómetros de ancho, está en la República Democrática del Congo y según el grupo de expertos italianos de la Universidad de Padua que se ha pasado meses analizando sus entrañas, fue producido por el impacto de un gran asteroide o un cometa durante la Era Mesozoica, a finales del período Jurásico, una época en la que dominaban los dinosaurios y los cocodrilos ya eran parte de la vida en la Tierra.
Localizado en la región de Wembo Nyama es uno de los 25 cráteres más grandes que hay en la Tierra. Según informa hoy la BBC, el encargado de presentar en sociedad al cráter fue Giovanni Monegato, de la Universidad de Padua. Fue durante la conferencia de Ciencia Lunar y Planetaria que se celebró a principios de marzo en Texas (EE.UU.).
Monegato dijo que el cráter pudo ser detectado luego de que los árboles desaparecieran de la zona en la última década, debido a la deforestación.
Una de las particularidades del cráter es que el río Unia fluye alrededor de su circunferencia, abrazando y resaltando su forma. El centro de la circunferencia es irregular y tiene unos 550 metros de altitud. La zona se eleva unos 60 metros sobre la depresión por donde circula el río Unia, una situación habitual en los cráteres producidos por impacto.
Según los científicos, los bordes del cráter han perdido el filo exterior bien definido debido al profundo desgaste y la erosión del clima tropical.
Además de la deforestación, una pieza clave en el estudio de este cráter es el satélite TerraMetrics. Pero ahora, toca el turno de viajar a la región para analizar la composición de las rocas del cráter.
Los científicos buscarán indicios que confirmen su teoría: que el cráter es producto de un impacto de un meteorito. La buena noticia la tendrán si encuentran cuarzo deformado. Este tipo de mineral sólo se encuentra en sitios donde se han producido explosiones nucleares o donde han caído asteroides.
Aunque no descartan que el cráter pueda tener otro origen, los científicos están seguros de que fue creado por el choque de un cuerpo celeste. "Soy bastante optimista acerca de que el origen del anillo fue un impacto", le dijo Monegato a la cadena británica y se animó a decir que la roca que impactó en el Congo medía alrededor de 2 kilómeros de ancho.
Los otros cráteres más grandes del mundo
El cráter del Congo no es una exclusividad de la Tierra. Aunque tiene una dimensión colosal, no está solo en el planeta. Lo acompañan -por su tamaño- otros 25 cráteres de impacto.
En la Earth Impact Database (Base de Datos de Impactos sobre la Tierra) encabeza el ranking por su tamaño el cráter de Vredefort, ubicado también en África. Tiene 300 kilómetros de ancho y 2.000 millones de años.
El segundo puesto es para el cráter de Sudbury, en Canadá, con 250 kilómetros de ancho y una antigüedad de 1.850 millones de años.
Pero sin dudas, el más famoso de todos es  el de Chicxulub, enterrado bajo la península mexicana del Yucatán, Se calcula que se originó hace unos 65 millones de años por el impacto de una megaroca espacial. El impacto fue tan brutal que se lo considera responsable de la extinción de los dinosaurios. Mide 180 kilómetros de diámetro y su nombre quiere decir en lengua maya "pulga del diablo" y es el tercero en la lista.
El de Popigai, en Rusia, tiene un diámetro de 100 kilómetros (35,7 millones de años) y el de Manicouagan, en Canadá, el mismo tamaño y 214 millones de años. Los sigue de cerca el de Acraman, en el sur de Australia con sus 90 kilómetros de diámetro.
El top ten se completa con el de la Bahía de Chesapeake (Estados Unidos), con el ruso en Puchezh-Katunki,  el cráter de Morokweng, ubicado en el desierto sudafricano de Kalahari y otro ruso, el de Kara.

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