Tensa ruptura por la custodia de sus hijos

Brad Pitt y Angelina Jolie han sido la pareja perfecta de Hollywood durante más de cinco años: atractivos, con talento, solidarios y padres de familia numerosa. Pero su condición de estrellas no les ha librado de una ruptura tormentosa, complicada aun más por las disputas por la custodia de sus seis hijos. Mientras un sector minoritario afirma que Brangelina siguen felices, los medios de todo el mundo dan por sentada su separación definitiva. Incluso el diario 'News of the World' ha desvelado un millonario acuerdo que establece que los intérpretes repartirían su fortuna a partes iguales. Brad y Angelina también compartirían la custodia de los niños, aunque éstos vivirían con la actriz, probablemente en el castillo que la pareja posee en Francia. Brad, que se quedaría con la mansión de Nueva Orleans, tendría acceso total tanto a sus hijos biológicos como a los adoptados. Sin embargo, fuentes cercanas a ambos afirman que Angelina quiere que su ex desaparezca por completo de su vida y de la de sus hijos, algo que al protagonista de 'Malditos bastardos' no le parece nada justo. De hecho, Brad estaría intentando salvar 'in extremis' la relación con la ayuda de su madre, una reconocida consejera matrimonial.
De momento, Brad Pitt ha decidido mudarse para estar más tranquilo y relajar el ambiente familiar. Según el periódico 'Daily Mail', el actor se ha comprado un piso de soltero en el exclusivo barrio de Hollywood Hills por el módico precio de 1,7 millones de euros. Brad se fijó en la casa hace tiempo y ha aprovechado el bajón anímico causado por la ruptura con Angelina para darse un capricho. Además, el intérprete se ha refugiado en su ex mujer, Jennifer Aniston, con la que siempre ha mantenido una excelente amistad. Su conexión es tal que se ha rumoreado, por enésima vez, con que han retomado su relación. Por el contrario, 'Showbiz Spy' ha publicado que Jen no se plantea en absoluto volver con él y que está buscando novio a través de una agencia de contactos. Sólo el tiempo dirá si Jennifer y Brad vuelven a ser esa pareja discreta y feliz de Hollywood, quizás muy a pesar de la celosa Angelina, que ha encontrado en un buen amigo, el cantante Wyclef Clean, el mayor apoyo para salir de este bache sentimental.
No le va mejor a Britney Spears, soltera desde hace unas semanas. Si su ex novio y mánager, Jason Trawick, quedó entonces como el malo de la película por una supuesta infidelidad, ahora señalan al extraño comportamiento de la 'Princesa del Pop' como causante de la ruptura. Cuando parecía que Britney había recuperado el rumbo de su vida personal y sentimental, fuentes cercanas a Jason han asegurado a la revista 'Now' que la cantante sufre "etapas maníacas en las que su comportamiento está fuera de control". Como consecuencia, Britney ha llegado a subirse encima de una mesa y ponerse a bailar o a contar los detalles íntimos de su relación con su representante a desconocidos. Además, los celos de la joven obligaban a Jason a ser más cauteloso a la hora de relacionarse con sus amigas, ya que su chica le miraba el correo electrónico y las llamadas del móvil. Todo esto podría quedarse en una mera anécdota si no fuera porque Britney tiene serios problemas para conciliar el sueño, hasta tal punto que a veces pide a alguien que se quede con ella por las noches. Miedo, paranoia o simplemente una mala racha provocada por su nuevo fracaso sentimental, lo cierto es que su actitud ha alertado a su entorno sobre una posible nueva crisis personal.
Por el contrario, Natalie Portman ha encontrado de nuevo el amor un año después de romper con su novio. La protagonista de 'V de Vendetta' sale desde otoño con el bailarín y coreógrafo Benjamin Millepied, pero no quería hacerlo público hasta que la relación se consolidara. El inicio de su romance fue de lo más cinematográfico, ya que Benjamin fue el profesor de Natalie durante los ensayos del rodaje de 'Black Swan', una película en la que la joven interpreta a una bailarina de ballet. Sin embargo, la chispa que saltó entre ellos no fue suficiente para que Benjamin rebajara la dureza de sus lecciones. "Yo creía que de pequeña era bastante buena bailando, pero fue entrar en la clase y pensar: 'No soy tan buena, realmente se me da fatal'. Fue un reto", ha confesado Natalie, cuyo tesón fue quizás uno de los encantos que conquistaron a su novio. Poco importa que la actriz haya reconocido que ella y sus colegas son "poco aseadas" cuando están tranquilamente en casa; ella ya tiene a un hombre que acepte sus defectos, al menos de momento.
En la crónica rosa nacional, Carlos Moyá y Carolina Cerezuela ponen el toque tierno a la semana con su próxima paternidad. En una exclusiva a la revista '¡Hola!', el tenista y la actriz, novios desde hace más de dos años, han anunciado que esperan un bebé "buscado, pensado y deseado". Carolina y su chico conocen la buena nueva desde hace poco más de dos semanas, coincidiendo con el cumpleaños de la rubia de 'Camera Café', quien decidió celebrar sus 30 primaveras en Melbourne con Carlos. Ninguno de los dos podía esperar a regresar a España, por lo que llamaron a su familia desde Australia a las 5.30 de la mañana. "Fue el despertar más dulce que han tenido nunca", destaca la presentadora, que explicó que su maternidad no implica una boda con el deportista: "No necesitamos un papel para demostrar que estamos juntos". La futura llegada de su bebé es la mejor prueba, aunque la pareja reconoce que todavía tienen que asimilarlo. Por eso, todavía no han elegido nombre para el churumbel ni se han planteado qué sexo prefieren. "Lo que nos importa es que todo salga bien".
Rafael Medina y Laura Vecino inician también una nueva etapa en sus vidas. El duque de Feria y su chica de toda la vida se casan, y no han dudado en proclamarlo a los cuatro vientos desde las páginas de '¡Hola!'. Ambos llevan tiempo plantéandose este importante paso en su relación, que finalmente darán en octubre. Los prometidos están ya liados con los preparativos y parece que se han repartido las tareas, ya que a Laura le toca buscar la iglesia y a Rafael organizar la pedida de mano. A la novia le espera también un difícil reto: elegir un vestido que satisfaga a su suegra, Nati Abascal, una de las mujeres más elegantes de España. Lo que sí han elegido es su ciudad de residencia: Madrid, donde Rafael tiene su tienda de moda y su restaurante y ella posee su estudio de arquitectura y trabaja como directora de estilismo de Mango. El Duque sella así siete años de amor con su chica: "No tenía dudas de que Laura era la persona con la que quiero compartir mi vida y formar una familia". Pues... ¡que vivan los novios!