Estudio revela que no existe la cura perfecta para el reflujo estomacal
Los pacientes con enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE) grave pueden optar entre fármacos o cirugía para aliviar los síntomas, pero un estudio advierte que ambos recursos difieren significativamente.
La ERGE hace que los líquidos estomacales vuelvan al esófago y la boca, lo que genera una sensación de quemazón. De hecho, sustancias en esos líquidos, como ácidos y bilis, pueden inflamar y lesionar el esófago.
En Suecia, el equipo de Lars Lundell, del Hospital Universitario Karolinska, en Huddinge, estudió a 255 pacientes con ERGE: 122 habían optado por una solución quirúrgica para controlar el reflujo y 133 usaban el fármaco omeprazol (Prilosec).
El estudio, que iba a durar cinco años, se prolongó a 12 y el equipo siguió en contacto con 53 pacientes operados y 71 tratados con el fármaco.
En estos 12 años de seguimiento, los investigadores observaron que "se pueden mejorar ambos tratamientos".
En la revista Clinical Gastroenterology and Hepatology, el equipo informa que de los 53 pacientes operados, 28 (el 53 por ciento) seguían en remisión continua. De los 71 tratados con el fármaco, el 45 por ciento con justes de la dosis y el 40 por ciento con dosis fija siguieron en remisión continua.
En general, la cirugía permitió controlar mejor los síntomas de la ERGE, como quemazón y regurgitación, pero el uso prolongado de omeprazol evitó los problemas posquirúrgicos al tragar, las flatulencias y la incapacidad de eructar o vomitar.
Al equipo le llamó la atención que las quejas posquirúrgicas no cedieron con el tiempo. El 38 por ciento de los pacientes operados necesitó fármacos para reducir la acidez estomacal.
La calidad de vida fue "similar (...) en ambos grupos durante todo el estudio", según los autores.
En un correo electrónico a Reuters Health, Lundell advirtió que la mayoría podría interpretar que el estudio concluyó que el omeprazol en dosis ajustadas es casi tan bueno como la cirugía.
En un editorial sobre el estudio, el doctor Stuart Jon Spechler, de la University of Texas, en Dallas, escribió: "Es difícil comprender por qué un pacientes con ERGE optaría por una cirugía potencialmente peligrosa para resolver un problema que se puede manejar tan bien con un fármaco razonablemente seguro".
AstraZeneca, que comercializa el omeprazol como Prilosec, financió el estudio.
FUENTE: Clinical Gastroenterology and Hepatology, diciembre del 2009.
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