Expertos argentinos afirman que Botnia emite químico peligroso

Botnia cumple hoy dos años de actividad en Uruguay pero no todo es festejo. Expertos argentinos señalan que la planta emite nonilfenol, un químico capaz de alterar el sistema hormonal en mamíferos y peces. Desde la Dinama se rechazó el informe.
Un artículo publicado ayer en el diario argentino Página 12, dio cuenta de un informe de expertos argentinos, el cual "arrojó contundentes pruebas de que la planta de Botnia emite nonilfenol en las aguas del río Uruguay".
Esta sustancia en grandes dosis "puede alterar el sistema hormonal tanto de las personas como de mamíferos y peces", se señaló en el artículo. De hecho (el nonilfenol y sus derivados, que se utilizan para pesticidas, detergentes, pinturas y lubricantes) fueron prohibidos por la Unión Europea desde enero de 2005 por considerarlo una "sustancia peligrosa".
El reporte al que se refiere Página 12 fue realizado por Juan Carlos Colombo, director del Laboratorio de Química Ambiental de la Universidad Nacional de La Plata (Argentina). El análisis de los especialistas abona la tesis de informes previos de la propia Universidad Nacional de La Plata y de la UBA, que referían a la existencia de "restos de nonilfenol y lindano, un veneno parecido al Gammexane" en el sedimento y algas del río Uruguay. El nuevo análisis sostiene que "luego de seis pruebas, esta segunda muestra dio una concentración de 962 ng/g (nanogramos por gramo) de nonilfenol en pulpa contra los 144 que había arrojado la primera".
Además, los especialistas indicaron que existen diferencias según el lugar de donde se tome la muestra: en aquellas extraídas de "la zona cercana a Botnia se observa que las concentraciones de nonilfenoles son siempre altas, mientras que las mismas disminuyen aguas abajo y especialmente en la Bahía de Ñandubaysal".
Según el diario argentino, "el origen fue una grave falla ocurrida en Botnia en enero de 2008, cuando se averió una de las tuberías de la fábrica y provocó un enorme derrame de la pulpa de celulosa. Cuestión de no dejar rastros, la empresa resolvió enterrar la pulpa dentro del terreno mismo de la fábrica. Sin embargo, gracias a algunos buenos contactos, el gobierno argentino pudo acceder a una muestra de esa sustancia que fue analizada por Colombo".
En la nota se señala que el informe, divulgado recientemente, no integró la presentación del equipo legal argentino durante las últimas audiencias en la La Haya, efectuadas en octubre pasado.
Respuesta. Desde la Dirección Nacional de Medio Ambiente (Dinama) se rechazó la hipótesis de los expertos.
La responsable de la Dinama, Alicia Torres, prefirió no hacer declaraciones al respecto aunque apuntó que el reclamo contra el nonilfenol "ya fue presentado en la Corte de la Haya y ya lo contestamos".
Por su parte, un asesor de la Dinama explicó a El País que se trata de un tema que "no es nuevo", pues ya había sido presentado ante La Haya en base a estudios anteriores del mismo laboratorio de La Plata.
La fuente marcó que "lo cierto es que Botnia no utiliza nonilfenol de ninguna manera para ningún proceso" y que eso quedó demostrado "de manera concluyente" por parte de la defensa uruguaya ante la Corte Internacional. El informante incluso afirmó que esta sustancia se utiliza, entre otros fines, para el lavado de lana tal como se hace en el parque industrial de Gualeguaychú.
En tanto, el gerente de la empresa, Ronald Beare, dijo ayer a la agencia ANSA que la planta "es efectivamente una de las mejores del mundo, tanto en operación, calidad del producto y parámetros medioambientales", aludiendo a los informes del monitoreo de calidad del agua y del aire. En ese marco, Botnia cumple hoy dos años de actividad en Uruguay.
Marcha de asambleístas contra "olor" de la fábrica
Cientos de ambientalistas argentinos participaron ayer de una caravana de automóviles en una nueva protesta contra la planta de Botnia, instalada en Fray Bentos.
"Solamente los ignorantes o los corruptos pueden decir que Botnia no contamina", rezaba una proclama leída por un representante de la Asamblea de Gualeguaychú, la que se movilizó sobre el puente internacional General San Martín. Los asambleístas acusaron a la planta de contaminar "nuestras aguas" y traer "la polución hacia nuestros hogares, sumando inseguridad a la calidad de vida de la población con los `incidentes ambientales` a que nos tiene acostumbrados casi a diario".
Los manifestantes intervinieron en la masiva caravana en protesta por el "mal olor" emanado de la pastera, que se encuentra paralizada para la realización de trabajos de mantenimiento.
Los asambleístas pretenden que esta queja se sume a la demanda argentina ante la Corte de La Haya.