Uruguay: suegra de senador tupamaro tenía su casa limpia como un espejo gracias a las limpiadoras de un hospital público, pagadas por el Estado

Empleados de Clanider S.A. cumplieron tareas de limpieza en la casa de la administradora del Hospital Maciel y de la suegra del senador Fernández Huidobro a costo del nosocomio, según elementos agregados al expediente que indaga la sobrefacturación de la empresa.
Las indagatorias judiciales y administrativas en torno a las irregularidades en el Hospital Maciel, que se desataron tras la constatación de que la empresa encargada de la limpieza durante al menos un año cobró por más horas de trabajo que las que realmente cumplió, continúan arrojando nuevos elementos que vuelven el caso todavía más complejo.
Así, de acuerdo con elementos aportados a la jueza Graciela Gatti y la fiscal Mónica Ferrero por el diputado nacionalista Jorge Gandini, empleados de Clanider S.A. cumplieron tareas de limpieza en los domicilios de la administradora del Hospital Maciel, Lucía Zagía y de la madre de la coordinadora de la empresa, Alejandra De Mello, esposa del senador frenteamplista Eleuterio Fernández Huidobro.
Según pudo saber El País, el legislador aportó el nombre de una empleada que concurría habitualmente a la casa de Zagía y de la madre de De Mello, que a pesar de figurar en la nómina de trabajadores que debían desarrollar tareas en el Hospital Maciel no asistía al nosocomio, aunque de todas maneras cobraba su sueldo como si cumpliera esa función. Sin dar a conocer detalles, el hecho de que empleados de Clanider S.A. prestaran servicios a privados a costo del Hospital Maciel había sido denunciado por Gandini cuando a mediados de agosto interpeló a la ministra de Salud Pública, María Julia Muñoz, a raíz de las irregularidades en el Hospital Maciel.
Consultado por El País, el parlamentario confirmó que presentó documentación a la Justicia en relación a los hechos que denunció en la interpelación, pero prefirió no hacer comentarios al respecto, debido a que se comprometió ante la jueza Gatti a no divulgar información sobre el caso.
Hasta el momento, la jueza Gatti y la fiscal Ferrero tomaron declaración solamente al contador del Hospital Maciel, Álvaro Núñez. Las magistradas esperan que tanto el Tribunal de Cuentas de la República (TCR) como la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE) remitan al juzgado las auditorías que confirman la sobrefacturación de $ 4.169.290 que equivalen a un total de 37.540 horas de trabajo.
Por otro lado, Gandini aportó a la Justicia información respecto a que empleados de Clanider S.A. en horas en las que debían estar desarrollando tareas en el Hospital Maciel, eran trasladados a realizar limpiezas para privados.
Según los elementos incorporados al expediente judicial, se trata de un grupo de cinco o seis funcionarias de la empresa que eran trasladadas en una camioneta, y que cobraban su trabajo fuera del centro asistencial como si fueran horas extra realizadas en el Hospital Maciel.
Las trabajadoras de Clanider S.A. realizaban limpiezas periódicas "a fondo" en terminaciones de obra, un hotel de alta rotatividad y un colegio privado, cuyos datos fueron agregados al expediente judicial.
Tanto las tareas de limpieza en la casa de Zagía y de la madre de De Mello como las labores para privados fueron cesadas por la empresa cuando a fines del mes de julio la constatación de la sobrefacturación de horas de trabajo al Hospital Maciel tomó estado público, según lo que informó Gandini a la magistrada Gatti.
Consultada ayer por El País, Zagía se excusó de realizar comentarios, alegando que se encuentra sumariada y separada de su cargo. De Mello, en tanto, no pudo ser ubicada y el director de Clanider S.A., Gabriel Leindekar, no respondió las llamadas en su celular.
Mientras tanto, el Directorio de ASSE pretende analizar en su sesión de hoy la situación generada en torno a las irregularidades constatadas en el Hospital Maciel y, según la visión de algunos directores, se podría tomar una definición al respecto en el encuentro.
Tanto la continuidad del director del centro asistencial, Daniel Parada, como la eventual rescisión del contrato con Clanider S.A. son las posibilidades que han manejado fuentes de ASSE consultadas por El País en los últimos días, las cuales calificaron la situación como "insostenible".
Parada, en declaraciones publicadas ayer por el diario Últimas Noticias, dijo no tener información respecto a su cese, y remarcó que no tiene pensado renunciar al cargo. El ministro interino de Salud Pública, Miguel Fernández Galeano, reiteró que el MSP mantiene su respaldo y confianza en la gestión de Parada en el centro asistencial.
A su vez, ASSE pretende tomar una decisión en torno a la situación de la administradora Zagía, quien no controló la cantidad de horas facturadas por la empresa y las efectivamente trabajadas. Además, según la auditoría del TCR, la funcionaria ordenó destruir registros sobre contrataciones de los años 2005 y 2006. Por ese hecho, ASSE evalúa presentar una denuncia penal contra Zagía.
El sindicato de trabajadores de Clanider S.A. tenía previsto reunirse ayer para evaluar los pasos a seguir en caso de que ASSE resuelva rescindir el contrato con la empresa. Sin embargo, los empleados de la firma pospusieron ese encuentro y acordaron que analizarán el tema cuando exista una resolución formal sobre la continuidad o no del acuerdo con el Hospital Maciel, dijo a El País el delegado gremial Robert Bentos. Los empleados de Clanider S.A. quieren mantener sus puestos de trabajo, y por eso manejan la posibilidad de conformar una cooperativa en caso de que ASSE disponga el cese del actual contrato.
Jueza y fiscal evalúan citar a la ministra de Salud Pública
El contenido de la carta que la ministra de Salud Pública, María Julia Muñoz, envió en mayo de 2008 al directorio del Hospital Maciel, Daniel Parada, felicitándolo por la experiencia de Clanider S.A., podría motivar que la jueza Graciela Gatti y la fiscal Mónica Ferrero resuelvan interrogar a la jerarca.
En la misiva, Muñoz le dice a Parada que la labor que desarrolla la empresa mediante los programas socioeducativos para sus empleados "enaltece" al Hospital Maciel. Agrega que, a su criterio, "sería de interés" que la experiencia fuera presentada a las autoridades de otros centros asistenciales para, eventualmente, extender el servicio de limpieza.
Por eso, la jueza Gatti y la fiscal Ferrero "no descartan" tomar declaración a Muñoz, dijeron a El País fuentes vinculadas al caso.
Si las magistradas deciden interrogarla, por su condición de ministra y según el Código del Proceso Penal, Muñoz podrá optar por concurrir al juzgado personalmente o solicitar que la jueza se constituya en su despacho. También tiene la opción de pedir que se le envíe un cuestionario para responder en forma escrita, explicaron las fuentes.
En tanto, en los últimos días Parada presentó un escrito ante la Justicia explicando algunos detalles sobre la operativa administrativa del Hospital Maciel. Parada es representado por el abogado Renato Echeverría, del estudio del ministro de Defensa, Gonzalo Fernández.