Los detenidos por asesinar a una pareja en Barcelona llevaban una semana viviendo en su coche en Francia

La pareja detenida ayer en Le Havre, en Francia, por presuntamente cometer el doble crimen de Abrera (Barcelona) llevaban al menos una semana viviendo en su coche --que estaba en busca y captura-- en el centro del municipio, lo que levantó sospechas en un control de la Policía Nacional francesa. Según informaron a Europa Press fuentes cercanas al caso, Héctor F.M. y su compañera sentimental, Susanna P.M. --hermano y cuñada del hombre que apareció en julio descuartizado en un congelador junto a su mujer, que no fue mutilada--, vivían en el coche, donde comían y dormían.
Los dos detenidos comparecen esta mañana ante el juez francés que se ha hecho cargo del caso, que deberá decidir su extradición, en el Tribunal de Rouen, donde fueron trasladados ayer por la mañana tras ser detenidos el lunes al mediodía.
Según fuentes judiciales, los dos detenidos no se oponen a ser extraditados, por lo que el proceso podría acelerarse y ser trasladados a España en varios días, y quedarán a disposición de la Audiencia Nacional.
La policía les detuvo respondiendo a una orden internacional de búsqueda y captura por dos delitos de asesinato y uno de aborto, ya que ella estaba embarazada, y ellos no opusieron resistencia.
Los Mossos d'Esquadra y el resto de cuerpos policiales buscaban al hermano y su mujer dentro y fuera de Catalunya desde que el 29 de julio, cuando la policía catalana halló los cadáveres en una urbanización de la localidad donde los hermanos convivían desde hacía un tiempo.
Además, la pareja desapareció poco antes de que la policía hallara los cadáveres de Hugo F.M., de 30 años, y su mujer, de nacionalidad china y de 26.
El caso, que está bajo secreto de sumario, tuvo lugar en una vivienda de dos plantas situada en el número 14 de la ronda de Sant Jordi de la urbanización Ca n'Amat, una zona residencial alejada del núcleo urbano de Abrera.
La vivienda era propiedad del padre de los fallecidos, y desde hace unos años vivía en ella el hijo mayor. Dos meses antes del crimen se mudaron también a la vivienda las dos víctimas, lo que al parecer suscitó disputas entre ellos. (Vista de Le Havre)