Mapuches repudian en Santiago el crimen de un joven en el sur de Chile

Un grupo de mapuches se concentró hoy en el centro de Santiago para repudiar la muerte del joven de 24 años que recibió un disparo por la espalda por parte de un policía, el pasado 12 de agosto. Una decena de indígenas, a los que se sumaron otros ciudadanos chilenos, participaron en la convocatoria que se desarrolló este sábado en la céntrica Plaza de Armas, donde pidieron la liberación de aquellos que consideran presos políticos mapuches. Durante la protesta, exigieron libertad, entre otros, para Mireya Figueroa, detenida en una cárcel de La Araucanía, y trasladada después a un hospital de Santiago al padecer cáncer, a la que se acusa de infracción a la Ley Antiterrorista por participar en el incendio de un fundo. Ataviados con sus ropas tradicionales y con la música que emanaba de los instrumentos característicos de esa etnia, los mapuches recolectaron alimentos no perecederos para la familia de Jaime Mendoza Collío, el joven muerto en La Araucanía la semana pasada. El carabinero Patricio Jara Muñoz sigue en prisión preventiva y ha sido procesado por "violencia innecesaria con resultado de muerte" en ese caso, ocurrido durante el desalojo de un predio que había sido ocupado por un grupo de mapuches. Los indígenas también recordaron hoy a Matías Catrileo, el joven de 22 años que falleció en un enfrentamiento similar el 3 de enero de 2008 al recibir un disparo de un policía, para el que el fiscal militar pide diez años de prisión. Con unos 600.000 miembros, los mapuche constituyen la principal etnia del país, con un 6% de la población total, y se concentran sobre todo en la región de La Araucanía, mientras que su presencia en el resto de regiones es minoritaria.