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CAUSA ABIERTA

Una mexicana pide que se reconozca que su marido fue asesinado por ser reportero

Una mexicana pide que se reconozca que su marido fue asesinado por ser reportero

La viuda del periodista mexicano Armando Rodríguez, asesinado en Ciudad Juárez el 13 de noviembre pasado, reclamó hoy a las autoridades que reconozcan que su esposo fue asesinado por ser reportero y eliminar así posibles especulaciones sobre su integridad profesional y personal. "El punto es que fueron a su casa a buscarlo expresamente para matarlo", explicó hoy Blanca Martínez, la mujer del reportero, que cubría asuntos policiales y sucesos en esa ciudad fronteriza con El Paso (Texas, EE.UU.) y considerada una de las más violentas del país. En una rueda de prensa Martínez denunció que el 23 de febrero pasado el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) recalificó el primer peritaje que se hizo del crimen, cometido cuando Rodríguez sacaba su automóvil del garaje de la casa para llevar a sus hijas a la escuela. El nuevo peritaje del IMSS considera que la muerte derivó de un "accidente de tránsito" y no del ejercicio periodístico propiamente. Rodríguez, conocido como "El Choco" en El Diario de Ciudad Juárez, donde trabajó desde 1993 hasta su muerte, fue acribillado por dos desconocidos hace nueve meses después de informar a su empresa que había recibido amenazas de muerte. "En memoria de Armando Rodríguez su familia no acepta que la muerte previsible de su esposo fue un 'accidente en trayecto' pues el ejercicio responsable de su profesión a él le costó la vida", dijo en la misma rueda de prensa la activista Elisabeth Flores, que negó que la denuncia tenga un trasfondo económico. Para su viuda y tres hijos fue una pérdida "inconsolable", remarcó Flores. La también portavoz del Centro de Pastoral Obrera de la diócesis de Ciudad Juárez, que apoya a la afectada, lamentó que la ley del IMSS no distinga "entre el trabajo de un reportero, de un obrero de maquila o de un mesero (camarero)" ni reconozca los riesgos del oficio de reportero en una ciudad con unos 1.600 homicidios dolosos en 2008 y más de un millar este año. A nueve meses de la muerte de Flores se mostró escéptica sobre el posible éxito de las investigaciones del caso. "Tenemos pocas esperanzas en que se ubique a los culpables y por consecuencia, (de conocer) el motivo de la muerte", indicó, al tiempo que demandaba a la fiscalía estatal de Chihuahua y la federal que se haga justicia de manera "pronta y expedita". Finalmente, para Aniceto Corona, coordinador del equipo legal del Centro de Pastoral Obrera, con una decisión como la asumida por IMSS, que no varía la cuantía de la pensión para la viuda e hijos de Rodríguez, se siembran dudas sobre la integridad de la víctima. "Si no se reconoce el riesgo del trabajo queda en entredicho la labor periodística de Armando", y si sucede al contrario, "no hay ninguna duda en su ética y en su profesionalismo", concluyó. En México, considerado uno de los países más peligrosos para ejercer el periodismo en Latinoamérica, han sido asesinados más de medio centenar de informadores desde 2000, según datos de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH).

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