Un empresario argentino-boliviano sentenciado en Chile a presidio perpetuo por asesinato de su hija
La Corte de Apelaciones sentenció hoy a presidio perpetuo calificado a Alejandro Saúl Schayman Klein, de origen argentino-boliviano, por el parricidio de su hija Tamara, informaron fuentes judiciales. Schayman Klein golpeó de forma brutal a Tamara Schyman Kychenthal el 28 de marzo de 1996, cuando la pequeña tenía cuatro meses de nacida, quien fue mantenida con vida por medios mecánicos en una clínica de Santiago (Chile) hasta el 11 de junio del 2002, cuando falleció. La pena de presidio perpetuo calificado es la máxima prevista en la legislación chilena y significa que el condenado no podrá optar a beneficio carcelario alguno antes de cumplir 40 años efectivos en la cárcel. El fallo unánime de los jueces de la IX Sala del tribunal de alzada modificó el dictamen de primera instancia, emitido el 6 de junio de 2006 por la jueza María Paz Rodríguez, del XII Juzgado del Crimen de Santiago, que había condenado a Schayman Klein, un ejecutivo de empresas de holgada situación económica, a 20 años de presidio. Además, la Corte anuló el pago de una indemnización de 200 millones de pesos (unos 370.000 dólares) por daño moral que la jueza había otorgado a Marianne Kychenthal Raby, esposa del parricida y madre de la víctima, por considerar que ella actuó con negligencia en el caso al no proteger de forma debida a la bebé. "Aquí la única víctima fue la menor, no puede considerarse víctima a su madre, y menos pretender que se le indemnice por daño moral. Ella no sufrió daño moral alguno y si así fuere, ella misma lo provocó con su conducta", sostiene el fallo.
0 comentarios