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CAUSA ABIERTA

Los siete 'reyes de la mala suerte'

Los siete 'reyes de la mala suerte'

Que hay gente de malas: es innegable. Pero el listado de casos que usted va a leer, y que fue publicado por 'Craked', es realmente sorprendente. Lo que les pasó a estas personas se sale de lo normal. Y es que: ¿cómo puede ser que alguien, destrozando toda racionalidad estadística, haya sido blanco de siete rayos durante su vida y que ninguna de esas descargas lo matara? Antes de comenzar leer este artículo toque madera, no pase por debajo de una escalera y quítese esa camisa que usó la última vez que su jefe lo regañó. No vaya a ser que la mala suerte sea contagiosa...Como para irse de viaje con ellos. Los estadounidenses Jason, de 42 años y Jenny Cairns-Lawrence, de 26, son la pareja de turistas más de malas del mundo. El 11 de septiembre del 2001 estaban en Nueva York cuando ocurrió el ataque a las Torres Gemelas, que dejó 3.000 muertos. Cuatro años más tarde, se encontraban en Londres, cuando el 7 de julio del 2005 varios islamistas atentaron en contra del sistema de transporte de esa ciudad y dejaron 52 muertos. Y en noviembre del 2008, cuando buscaban relajarse en la exótica ciudad india de Bombay, terroristas islámicos atacaron varios sitios de la ciudad con un saldo de 164 personas muertas. Como para irse de viaje con ellos...

Naufragó tres veces

Violet Jessop parece haber sido una protegida del rey Neptuno, pues sobrevivió a tres naufragios, incluido el más trágico y famoso de todos. El primero de ellos ocurrió en 1911, en el barco Olympic; el segundo fue en el famoso Titanic, en 1912 (ambos naufragios con el mismo capitán) y el tercero en el Britanic, en 1916, donde trabajó como enfermera. Violet, de nacionalidad inglesa, murió a los 83 años de una falla cardíaca e irónicamente pidió que sus cenizas fueran esparcidas en el mar. ¿Tributo de agradecimiento al rey Neptuno?

Pararrayos humano

La estadística dice que la posibilidad de que un rayo impacte a una persona es de 1 en 3.000. Y la posibilidad de que eso le ocurra siete veces a una misma persona es de 1 en 22 septillones de veces. Pues bien, justo eso es lo que le pasó a Roy Sullivan, un guardia forestal que trabajaba en el Shenandoah National Park, en Virginia, E.U., y a quien se conoce con el nombre del 'Pararrayos Humano'. Dos de sus chamuscados sombreros están exhibidos en el Museo Guinness de Nueva York. Pero lo irónico es que lo que no pudieron hacer los rayos, si lo logró una decepción amorosa, que lo llevó al suicidio.

Testigo de tres asesinatos presidenciales

Robert Todd Lincoln, hijo del asesinado presidente Abraham Lincoln, no fue precisamente una persona de 'buena espalda'. Robert pasó a la historia como el único ciudadano de E.U. que ha estado presente o cerca de tres asesinatos de presidentes de ese país. Robert estaba acompañando a sus padres a un teatro de Washington DC, la noche en que su padre fue baleado, el 14 de abril de 1865. También estuvo en la estación de tren de Washington el 2 de julio de 1881, cuando le dispararon al presidente James A. Garfield; y 20 años después, el 6 de septiembre de 1901, asistió a una exposición en Buffalo (N.Y.), donde atentaron contra el presidente William McKinley.

Le tocaron dos bombas atómicas

Uno de los casos más insólitos es el del ingeniero japonés Tsutomu Yamaguchi, quien tuvo la mala suerte de estar en las dos ciudades destruidas por bombas atómicas en la historia de la humanidad, Hiroshima y Nagasaki, cuando ocurrieron las explosiones. A Hiroshima fue por un viaje de negocios el 6 de agosto de 1945. Cuando apenas se bajaba del tranvía explotó la bomba a menos de tres kilómetros de distancia, lo que le ocasionó graves quemaduras en su cuerpo. Entonces, Yamaguchi decidió regresar a su casa en Nagasaki y a los tres días, cuando se encontraba en la oficina de su supervisor, la otra bomba atómica detonó también a tres kilómetros. En esta oportunidad también sobrevivió. Ahora tiene 93 años y se dedica a contar su experiencia como único testigo vivo de estas dos tragedias.

Una mujer salada

A Jeanne Rogers le ha pasado de todo. A los 18 años estaba en un crucero tomando unas fotografías y cayó al océano. Años más tarde, cuando caminaba por una calle con su hijo, Jeanne fue atacada por un murciélago que, no solo la rasguñó, sino que se orinó encima de ella. Pero hay más: esta mujer fue alcanzada por rayos en dos ocasiones; se ha caído en alcantarillas y hasta le han disparado. Como para salir con ella...

Herida por un meteorito

Ann Hodges es la única persona del mundo que ha sido herida por un fragmento de meteorito. El hecho ocurrió el 30 de noviembre de 1954, cuando estaba tomando una siesta en la sala de su casa en Oak Grove, Alabama. El meteorito, luego bautizado con el apellido de su víctima, atravesó el techo, rebotó en una consola e impactó en un costado del cuerpo de Ann, quien por ese entonces tenía 31 años. Hoy, el objeto espacial reposa en el Museo de Historia Natural de Alabama. (Por Ana María Jaramillo, El Tiempo)

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