La emocionante historia del joven de Guatemala que necesita un corazón nuevo

El guatemalteco José Oxlaj-González, que precisa de un trasplante de corazón y no tiene ni permiso de residencia ni seguro médico en EU, recibió la visita de sus padres en el hospital de Georgia donde está internado, gracias a unas visas humanitarias que se les concedieron. "A José se le cumplió su sueño de volver a ver a sus padres y ojalá el poder del amor de su familia lo pueda levantar un poquito y pueda vivir un tiempo más", señaló Beatriz Illescas, cónsul de Guatemala en Atlanta. Los padres del joven de 18 años, María y Pascual, llegaron el jueves por la noche procedentes de Guatemala, luego de que las autoridades estadounidenses les concedieran una visa humanitaria por una semana. Oxlaj-González requiere un trasplante de corazón para seguir con vida, pero carece de seguro médico y su condición de indocumentado hace poco probable que pueda recibirlo, según reconoce el equipo médico que lo atiende en la ciudad de Rome, al noroeste de Atlanta. "Para vivir más tiempo, él necesitaría un trasplante de corazón, pero no tiene los fondos y la espera para encontrar un donante compatible podría ser de hasta dos años, por lo que ya dos hospitales nos han dicho que no pueden ayudarlo", dijo Karl Hewitt, una de las enfermeras del equipo que le atiende. Hewitt realizó gestiones para que los padres del paciente pudieran viajar a EU. El joven permanece internado desde hace un mes y recibe medicamentos intravenosos 24 horas al día para mantener estable su corazón. "Su músculo del corazón es muy débil y está constantemente medicado, si se le retira la medicación, su condición empeora inmediatamente, por eso hicimos las gestiones para traer a sus padres porque él no podía resistir el viaje", dijo Hewitt tras explicar que se trata de la cuarta vez que Juan ha sido internado desde noviembre. Oxlaj-González llegó Estados Unidos el pasado año procedente de Jacaltenango, una localidad eminentemente agrícola, en busca de trabajo para ayudar a sus padres y tres hermanos que quedaron en Guatemala. El joven agradeció a "Dios y a la CNN" por la bendición de encontrarse con sus padres.