La Reserva Federal de Estados Unidos ve indicios de que la crisis se modera

La economía de EE.UU. tuvo una contracción más profunda de lo esperado en el primer trimestre, pero algunos datos entregan señales de que lo peor podría haber pasado. El Producto Interno Bruto (PIB) estadounidense retrocedió 6,1% anualizado, frente al 4,8% en promedio que esperaban los analistas. Con esto, ya son nueve meses que la primera economía del mundo decrece, lo que no pasaba desde 1974-1975. El mayor golpe vino por la fuerte caída en las exportaciones y de los inventarios de las empresas estadounidenses, que se desplomaron un récord de US$ 103.700 millones. Si se excluye este último factor, el retroceso fue de 3,4%. Sin embargo, los economistas vieron señales positivas detrás del PIB divulgado ayer.
El gasto en el consumo aumentó 2,2%, su mayor salto en dos años, y aunque es un "alza moderada, el consumo es lo que casi siempre ha sacado a la economía norteamericana de una recesión", afirma Ellen Zentner, economista senior de The Bank of Tokyo-Mitsubishi.
Pese a que la reducción en los inventarios sustrajo 2,8 puntos al desempeño del primer trimestre, es un signo positivo para la actividad futura, pues sentaría las bases para que la industria ponga a trabajar las fábricas y contrate personal a la primera señal de que la demanda aumente, explica Richard Yamarone, director de Argus Research Corp.
Los economistas consultados por "El Mercurio" coinciden en que la crisis podría ya haber tocado fondo, como afirma Kathryn Rooney, analista senior de Bulltick Capital Markets. "Las buenas noticias del informe sobre el PIB es que la fase más severa de la recesión está detrás nuestro", asegura Brian Bethune, economista jefe de IHS Global Insight.
En tanto, Paul Volker, presidente del Consejo de la Recuperación Económica de la Casa Blanca, aseguró que "la economía se está estabilizando", y afirmó que no harán falta nuevos estímulos.
Sin embargo, todos advierten que la recuperación será lenta. La Reserva Federal también mostró un optimismo cauto al afirmar que parece estar desacelerándose el ritmo de la caída de la economía.
Al finalizar su junta de dos días, el instituto emisor afirmó que el panorama económico ha mejorado modestamente desde su reunión de marzo, pero que la actividad debería permanecer débil por un tiempo más. La Reserva Federal resolvió ayer dejar la tasa dentro del margen de 0 y 0,25%. (El Mercurio)