Blogia
CAUSA ABIERTA

Un menor de edad y su novia adolescente mataron al taxista en Montevideo

Un menor de edad y su novia adolescente mataron al taxista en Montevideo

Finalmente, a siete días del crimen, los policías de la Brigada de Asaltos lograron aclarar el homicidio del taxista Carlos Alberto García, de 42 años. "El Santi" y "La Cata" volvieron al Inau pero ahora por homicidio muy especialmente agravado. Hoy el director de la Dirección de Investigaciones de la Jefatura de Montevideo, inspector mayor Milton Rodríguez Tito, se reunirá con el padre del trabajador asesinado de un tiro en una rapiña en el Cerro. Para el esclarecimiento del crimen fue fundamental el hallazgo del arma calibre 22 con que le dispararon en el hombro a García, en la casa de la menor de 17 años. El autor material del disparo fue "El Santi" pero la Justicia comprobó que la joven tuvo una activa participación en el homicidio. Por eso, fueron procesados por el mismo delito. También las huellas dactilares de la joven estaban en el auto, según corroboró el peritaje de Policía Técnica. Ésta, posiblemente desconfiaba de que sus huellas la pudieran delatar por eso había admitido a la Policía que sí había estado en el escena del crimen pero aduciendo que llegó cuando el taximetrista ya estaba muerto y que abrió la puerta para ver si había algo para robar. Sin embargo, su improbable coartada se cayó por el hallazgo del arma y por el testimonio de una vecina que fue la primera en llegar al vehículo en cuanto escuchó la detonación.

Si bien los menores culpaban del crimen al rapiñero apodado "El Bocha", ya procesado por varias rapiñas al transporte, luego que la División Homicidios lo capturó quedó claro que éste no participó del fatal atraco.

"El Bocha" sí actuó en algunos atracos con la joven pero no en el que terminó con la vida de García. La pareja se encontró en un bar con "El Bocha" luego del homicidio y le contó lo que había pasado. Por esto, el delincuente declaró a la policía que sabía que el autor del disparo había sido "El Santi". La pareja también fue procesada por seis delitos de rapiña a taxis cometidos en la zona del Cerro. Se estima que son autores de muchos atracos más, también a ómnibus. Como informó El País la noche del viernes de Semana Santa, García intentó resistirse a la rapiña acelerando el auto pero recibió un tiro en el hombro izquierdo. La bala calibre 22 hizo su recorrido y llegó al corazón. Los delincuentes huyeron sin llevarse nada. Quedaron en el auto la recaudación y la billetera del trabajador. García Olivera fue enterrado el mismo día en que dos de sus cuatro hijos, mellizos, cumplían siete años.

A raíz de la sangrienta rapiña, que se transformó en la segunda fatal en lo que va del año, el sindicato del taxi solicitó nuevas medidas de seguridad para los coches. Desde junio, tendrán trabapuertas y alza cristales eléctricos manejados por el chofer. (El País)

0 comentarios