Conmoción en Mendoza por la violación y crimen de una jovencita de 15 años
Mayra Evelin Tarifa, de 15 años, estaba desaparecida desde el miércoles pasado a la tarde. Hija de una familia humilde, la chica fue vista por última vez cuando se dirigía hacia el colegio ubicado en Los Barriales, en la localidad mendocina de Junín, una de las zonas vitivinícolas más importantes del país. Ayer, la Policía halló muerta a la joven flotando en las aguas del canal San Martín. La autopsia arrojó que había sido violada y asesinada. La Policía detuvo anoche a un sospechoso, un hombre vecino al lugar en el que la chica solía bajar del micro para ir a la escuela. "Personal de Seguridad logró la aprehensión de un sospechoso de haber cometido el crimen. Ahora está detenido para tratar de determinar si participó o no en el hecho", dijo al diario Los Andes Juan Carlos Calleri, director de Investigaciones de la Policía mendocina. El sospechoso es un hombre de 40 años. "Se está trabajando en conjunto con la División Homicidio de Junín para esclarer el caso", afirmó Calleri.
Según la autopsia, la chica recibió fuertes golpes en la cabeza y presentaba lesiones vaginales y anales. "Nunca llegó a la escuela y no sabemos quién se la llevó. Mi hija era una chica sencilla y tímida, que iba de la casa a la escuela y de la escuela a la casa", relató Carlos Tarifa, padre de la víctima.
La investigación está a cargo del juez de Instrucción Ricardo Shulz. La chica vivía con sus padres y cinco hermanos, en una casa ubicada en un camino de tierra que atraviesa algunos viñedos, en el distrito rural de Rodríguez Peña, a unos 10 kilómetros al oeste de Junín y a 65 de la capital mendocina.
Según contó a Los Andes uno de sus hermanos, Raúl, de 17 años, la chica "no tenía novio ni amigos que la visitaran, sólo algunas amigas". El miércoles al mediodía, Mayra se fue en moto con su mamá que la acercó hasta la ruta 61, donde solía esperar el colectivo para ir a la escuela. Ese día tenía la primera hora libre.
"La mamá la dejó en la parada y se volvió a la finca, porque tenía que seguir con la cosecha", dijo un familiar. Una vecina vio a Mayra desde la ventana de su casa caminando por la ruta en dirección la pueblo. Luego, se tomó el micro que la dejó en el cruce de las rutas 61 y 60, frente a una estación transformadora de energía.
Ella solía bajar allí y caminar un kilometro más hasta la escuela, donde cursaba el primer año. "Está confirmado que la chica subió al colectivo y que se bajó donde lo hacía siempre, eso tiene que haber sido cerca de las 14.30. En el micro no se encontró con ninguna compañera porque tomó un colectivo anterior. Lo que no sabemos todavía es qué pasó mientras caminaba a la escuela", explicó una fuente del caso.
Hasta el momento, la hipótesis es que mientras caminaba hacia el colegio, Mayra fue sorprendia por alguien que la violó y asesinó: "Tiene que haber sido en un vehículo, lo que no sabemos es si ella lo conocía o no", agregó la fuente. Al empezar a caer la tarde, los padres de Mayra comenzaron a preocuparse. La chica no volvía. Ya nunca más lo haría.
Luego, sus padres también se enterarían de que Mayra incluso ni siquiera había llegado a la escuela. "Ella tiene tíos en Barriales y en Rodríguez Peña, por lo que primero averiguamos si estaba en alguna de esas casas", explicó un familiar.
Esa misma noche, los padres radicaron una denuncia en la subcomisaría de Rodríguez Peña. "Al final, su cuerpito apareció flotando en el canal. No es justo, era una chica muy buena. Vamos a organizarnos para salir a pedir justicia. Lo único que puedo decirle al gobierno es que se dejen de prometer cosas y hagan algo por la seguridad de la gente", concluyó un tío.
La Policía demoró primero a un chico conocido de Mayra, pero después se comprobó que no tenía ninguna relación con el hecho. Un testigo que vio un auto similar al que tiene el sospechoso, llevó a que fuera arrestado, aunque todavía la investigación tiene que avanzar con una serie de pericias para empezar a constatar su responsabilidad. Una de las pruebas importantes la arrojará el exámen genético a los restos de semén hallados en la chica.
Los investigadores están seguros de que Mayra fue atacada entre el lugar en el que se bajó del micro y la escuela. Entre un punto y otro hay un kilómetro de distancia. Otra de las conclusiones de la autopsia, es que si bien la chica recibió fuertes golpes en la cabeza, fue arrojada al canal aún con vida, ya que los forenses encontraron agua en sus pulmones. (Clarín)
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fatima carlota -