En Uruguay bloquean 6.000 celulares por mes por denuncias de robo o extravío

Un promedio de 6.000 teléfonos celulares por mes son bloqueados por denuncias de robo o extravío, según estadísticas de la Cámara de Telecomunicaciones del Uruguay.

Las denuncias son las que llegan directamente a las tres empresas operadoras de telefonía móvil y abarcan todo el país. Hay otro número no especificado de aparatos robados que son denunciados en las comisarías de Policía, pero que no se reportan para proceder al bloqueo.

Con el objetivo de desestimular el robo de terminales, a partir de una iniciativa de la Cámara de Telecomunicaciones, los tres operadores de telefonía móvil —Antel; Claro y Movistar— junto con el organismo regulador (Ursec), acordaron en diciembre de 2011 generar un sistema que permitiera identificar los celulares robados o extraviados e intercambiar listas para que todas las empresas procedieran a bloquear el servicio.

La creación de ese registro procura combatir el alto tráfico ilegal de aparatos robados que "van a parar a manos de delincuentes y narcotraficantes mediante la reventa ilícita", confió a El País una fuente de la Jefatura de Montevideo.

Es una constante en las bocas de venta de drogas que son allanadas por la Policía, cada vez que realiza un operativo contra el narcotráfico que, además de drogas, dinero, armas y objetos robados, haya gran cantidad de celulares que son dejados como "pago" por un puñado de dosis.

La Cámara de Telecomunicaciones está coordinando con el Ministerio del Interior para bloquear también los aparatos denunciados directamente a la Policía, al tiempo que se está trabajando para compartir la información a nivel internacional para desestimular el uso en otros países.

El negocio de la reventa ilegal de celulares alcanza cifras millonarias en pesos, aunque por constituir un "mercado negro" no se puede cuantificar con precisión.

En Argentina se estima que ese comercio representa más de 400 millones de pesos uruguayos al mes, según un informe de la agencia Telam en base a datos del Ente Nacional de Comunicaciones. En el vecino país, unos 5.000 celulares son robados por día.

En Uruguay, según cifras de la Ursec, existían el año pasado 5.495.000 celulares activos, lo que representa 1,6 aparatos por cada habitante. El mercado ha crecido de forma sostenida desde 2005, aunque la racha alcista se estabilizó en 2015.

El promedio de 6.000 teléfonos que son bloqueados al mes en Uruguay "se ha mantenido estable en el tiempo desde que comenzó a llevarse el registro", contó una fuente de la Cámara de Telecomunicaciones.

Una vez que se presenta la denuncia de hurto o pérdida del apartato ante el prestador del servicio (Antel, Claro o Movistar), cada operador asocia el número de IMEI correspondiente, lo ingresa a una lista con los datos de identificación de la unidad y comparte con los demás operadores la información, quienes proceden a su bloqueo definitivo, lo que implica que no puede funcionar en ninguna de las redes de los operadores del país.

El número de IMEI (sigla en inglés de International Mobile Equipment Identity) es "la cédula de identidad" de los teléfonos móviles. Es un código pre-grabado por el fabricante del aparato que lo identifica a nivel mundial.

Cuando un usuario compra un celular por fuera de los canales habilitados, debería verificar que el IMEI no haya sido reconfigurado. Ese número, de 15 hasta 20 dígitos, figura debajo de donde coloca la batería y puede ser confirmado también marcando *#06#.

En caso de que el denunciante recupere el equipo, puede dejar sin efecto la denuncia y se procede a reactiva el aparato.

"Cuando la denuncia es realizada por agentes de venta o importadores, por el robo de equipos aún no conectados a un operador, la misma debe ser acompañada por la denuncia policial", explicó la Cámara.