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CAUSA ABIERTA

Le transplantan dos pulmones y 6 meses después participa en una carrera

Le transplantan dos pulmones y 6 meses después participa en una carrera

Eamonn Kelly está acostumbrado a superar retos imposibles. El primero de ellos, hace seis meses. Tras sufrir una fibrosis quística, tuvo que pasar por quirófano y someterse a una complejísima operación para que le transplantaran dos pulmones. El segundo, correr en su estado una carrera de 5.000 metros. Ha pasado los dos desafíos con éxito, y ahora disfruta de una vida plena.

La idea de correr una carrera a pesar de su precaria salud le vino a la cabeza cuando estaba en el hospital recuperándose del transplante. Como confiesa a today.com, quería ‘estrenar’ sus nuevos pulmones compitiendo.

La vida de este estadounidense de 32 años de edad, no ha sido nada fácil. Este profesor de ciencias nació con fibrosis quística, una enfermedad degenerativa que afecta principalmente a los pulmones y al sistema digestivo. Para mantener controlada la enfermedad, Kelly necesitó un cuidado permanente con continuos tratamientos para las complicaciones pulmonares y digestivas.

En esas zonas del cuerpo se producen producen secreciones, dando lugar a un espesamiento y disminución del contenido de agua, sodio y potasio originándose una obstrucción que puede derivar con mucha facilidad en infecciones e inflamaciones que destruyen zonas del pulmón, hígado, páncreas y sistema reproductor.

En los últimos cuatro años, Eamonn ha vivido conectado a una botella de oxígeno, debido a una insuficiencia pulmonar crónica. Este problema apenas le permitía moverse, ya que se se sentía continuamente agotado.

Por eso cuando abandonó el hospital, lo primero que hizo fue intentar correr en una cinta en la que seleccionó una velocidad de 16 kilómetros por hora y solo pudo aguantar 10 segundos.  Su terapeuta le recomendó otra estrategia: correr 15 segundos, luego andar 15 segundos y luego correr otros 15 segundos, y a velocidades más bajas. Tras un mes siguiendo este ritmo, llegó a hacer 400 metros sin legar a pararse.

Tras semanas intentándolo, por fin llegó a cumplir su primer objetivo: correr 3 kilómetros sin pararse. A partir de ahí, experimentó una notable mejoría, hasta el día de la carrera de los 5.000 metros, que completó en 38 minutos y 33 segundos.

Pero las carreras no son el único propósito de Eamonn. Con sus nuevos pulmones espera poder visitar Islandia y Japón. Y también servir de ejemplo para todos aquellos que sufren fibrosis quística. Y no solo eso  “Quiero que la gente se inspire en mi historia para que se anima a donar órganos. Quiero que alguien más tenga las mismas oportunidades que yo he tenido”, asegura en declaraciones concedidas a today.com.
WTB

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