Siete presos políticos cubanos excarcelados y sus familias viajaron a España

Los primeros siete presos políticos, de 52 que el Gobierno de Cuba aceptó liberar, salieron este lunes al exilio en España junto a sus familias, tras lograr la Iglesia Católica y Madrid la mayor excarcelación en más de una década en la isla comunista. Según un portavoz de la Embajada de España, seis excarcelados y sus parientes abordaron el vuelo regular de Air Europa y el otro viajó poco después en Iberia, alrededor de las 23H00 locales (03H00 GMT del martes), sin que la prensa pudiera tener acceso al grupo.
Pablo Pacheco, José Luis García Paneque, Léster González, Antonio Villarreal, Julio César Gálvez, Omar Ruíz y Ricardo González, integran el grupo de excarcelados que partió la noche del lunes, precisó a AFP el opositor y ex preso político Oscar Espinosa, quien recibió la lista de uno de ellos que lo llamó desde el aeropuerto para despedirse.
"Vine a atestiguar su salida, pero (...) los ingresaron temprano y concentraron en un salón frente a la puerta de abordaje. No hubo posibilidad de acceso", dijo a AFP el disidente Elizardo Sánchez en el aeropuerto internacional, tras quejarse de que para la emigración, los presos sean concentrados en un hospital de una prisión de La Habana y las familias en un hotel del Ministerio del Interior.
Los siete son los primeros de 20 presos políticos que emigrarán a España entre este lunes y miércoles, según una lista que actualizó el lunes la Iglesia, sin que se descarte que sean más pues España dijo estar dispuesta a acoger a los 52 excarcelados.
En momentos en que Cuba centra atención internacional por las excarcelaciones, el líder comunista Fidel Castro, próximo a cumplir 84 años y retirado del gobierno desde 2006 por enfermedad, apareció el lunes en televisión en un programa grabado, su primera entrevista difundida en tres años y su segunda presentación al público en menos de una semana.
De buen semblante y relajado, Castro, quien visitó un centro científico el pasado miércoles, habló con fluidez en el programa, de más de una hora, sobre la situación en Medio Oriente, sin tocar la actualidad de su país.
"El video es su forma de decir estoy aquí. Son presos de Fidel. Nunca debieron estar encarcelados, son inocentes. Nos preocupa este trueque de prisión por destierro. Un desarraigo tiene un impacto familiar negativo", comentó Sánchez.
Según la Iglesia, la emigración no es una exigencia, los excarcelados podrán volver a Cuba con un permiso especial y sus familias cuando lo deseen, y no perderán sus propiedades en la isla.
Los 52 opositores eran los que quedaban tras las rejas del grupo de 75 arrestados en una redada masiva en marzo de 2003 y condenados un mes después en juicios sumarios a penas de 6 a 28 años, en un caso que desató la condena internacional y tensó las relaciones entre Cuba y la Unión Europea (UE).
Fruto de un diálogo sin precedentes entre Raúl Castro y el cardenal Jaime Ortega, la excarcelación del medio centenar es la mayor desde que Fidel Castro sacó de prisión a un centenar de opositores tras la histórica visita a Cuba del papa Juan Pablo II en 1998.
Con el fin de acompañar el diálogo y acelerar las negociaciones de la Iglesia en favor de los presos, el canciller español Miguel Angel Moratinos viajó la semana pasada y durante su visita el cardenal anunció el jueves el compromiso oficial.
Tras el anuncio, el opositor Guillermo Fariñas, de 48 años, depuso una huelga de hambre que mantuvo por 135 días para exigir la excarcelación de los 25 presos más enfermos.
La decisión de Raúl Castro fue saludada por la UE, Estados Unidos, otros países, y organismos que criticaron a Cuba por la muerte en febrero del preso opositor Orlando Zapata, tras 85 días de huelga de hambre y por el ayuno de Fariñas.
Según Sánchez, con las excarcelaciones la cifra de presos políticos bajará a 115.