Messi se abrazó a la historia y el Barcelona festejó otro título

¿Dónde está el techo de Lionel Messi? A sus 22 años, La Pulga sigue alcanzando nuevas metas y hoy se proclamó como mejor goleador de la Liga española por primera vez en su carrera y lideró al Barcelona hacia otro título de Liga. Además, concluyó el torneo con 34 goles, cifra récord que había logrado el brasileño Ronaldo en la 96/97. También, como sumó 47 gritos en la temporada, logró el Botín de Oro, el galardón que se le otorga al máximo goleador del fútbol europeo. La reivindicación de un jugador estupendo que no pudo hacer la diferencia en las semifinales de la Champions League y que está a un mes de tener la chance de dar otro salto grande en el Mundial.
El argentino vivió una temporada sensacional, en la que se benefició enormemente del enésimo "invento táctico" de Pep Guardiola, su entrenador. Durante un tramo de la temporada, el Barcelona vivió algo atascado en ataque. Ni Thierry Henry ni Zlatan Ibrahimovic ofrecieronsoluciones ofensivas y Guardiola aplicó el bisturí para extirpar la herida.
La solución fue la menos inmaginable de todas: sacó a Messi de una banda y lo situó como delantero centro, con plena libertad de movimientos. Fue un plan utilizado por Guardiola con éxito en algunos momentos de la pasada temporada, pero nadie pensaba que esta vez fuera a convertirse en norma.
Porque, en principio, sonaba muy atrevido que el Barcelona jugara con un delantero cuyas características físicas están alejadas del nuev que hoy se estila, tan grande y musculoso. Pero el argentino agitó el árbol y los goles cayeron sin descanso.
La evolución de Messi como jugador se explica a través de su enorme progresión como goleador en la Liga española. Acabó el torneo de 2008 con 10 goles, hizo 23 en 2009 y esta temporada consiguió los 34 tantos.
No sólo su nueva posición en el campo propició su marca goleadora, sino también los evidentes progresos del futbolista en el remate.
Así, Messi ya no es "sólo" un futbolista que marca goles tras dejar tirados a tres rivales en jugada individual. Leo mejoró notablemente otros aspectos importantes del juego.
Cierto es que hoy, ante Valladolid, los dos primeros goles, anotados por Prieto (en contra) y Pedro, le dieron tranquilidad. Pero fue su magia la que le terminó por dar ese clima de fiesta y superioridad total al Barcelona. En definitiva, una situación que se repitió a lo largo del año.
Ahora el reto de Messi es trasladar lo que consiguió con el Barcelona a la Selección en el Mundial. ¿También podrá lograrlo?