Blogia
CAUSA ABIERTA

Uruguay: Niña de 10 años violada y asesinada por concubino de su tía en Rivera

Uruguay: Niña de 10 años violada y asesinada por concubino de su tía en Rivera

La violación y asesinato de Jennifer Carolai Cuña Valerio, de 10 años, sacudió ayer a los riverenses. El homicida es el concubino de la tía materna de la niña, de 29 años, que confesó el crimen a la Policía e indicó donde había enterrado el cuerpo.
El trágico suceso revivió en la memoria colectiva imágenes de dolor y angustia provocadas por desapariciones, violaciones y homicidios de menores, episodios que durante la década de 1990 tuvieron en vilo a todo el país.
Según publica hoy El País, la desaparición de la niña fue informada a las 9 de la mañana de ayer, denunciada por la abuela de la niña, ya que Jennifer se había quedado a dormir allí en la noche del domingo.
El Jefe de Policía, Heriberto Fagúndez, conformó de inmediato dos equipos para llevar adelante las investigaciones, cumpliendo con la rutina que aplica en cada desaparición de un menor, temiendo, siempre, lo peor.
El brutal homicida, RPG, es el concubino de la tía materna de la niña. Tiene 29 años.
Efectivos de la Dirección de Investigaciones detuvieron al hombre luego de recabar testimonios entre los vecinos, quienes aseguraron haberlo visto en inmediaciones de la vivienda cuando la niña estaba sola, entre las 6 y las 9 de la mañana de ayer.
El primer elemento que llamó la atención de los investigadores fue que el hombre tenía heridas en el rostro y en otras partes del cuerpo. Al ser interrogado afirmó que había salido a cazar y se había lastimado al cruzar por unos arbustos de uña de gato. Su endeble versión, lejos de conformar a los uniformados, sirvió para que estos insistieran, hasta que lograron su confesión. Fue el propio homicida quien acompañó a la Policía al lugar donde había enterrado a la niña desnuda, en la ribera del arroyo Cuñapirú. Arrojó las ropas al arroyo.
De acuerdo a la información obtenida por la Policía, todo parece indicar que el hombre comenzó en la noche del domingo a tejer su macabra trama, cuando se enteró que la niña iba a dormir en casa de su abuela.
El padre de Jennifer es un sargento de la Policía que esa noche viajaba a Montevideo para cumplir con su guardia semanal en el Comcar.
Ayer, el homicida acompañó a su suegra a un centro asistencial. Luego volvió a la vivienda, sometió a la menor y luego la mató. En sus declaraciones involucró a otras dos personas. Uno de los acusados está detenido, y el tercero se encontraba aun requerido en la noche de ayer.
El homicida llevó a la Policía al lugar donde había sepultado a la infortunada Jeniffer Carolai Cuña Valerio en un camino vecinal, a tres kilómetros de la ruta al aeropuerto, en las márgenes del arroyo Cuñapirú, en un lugar de muy difícil acceso. Para trasladarla al lugar contó con la colaboración de un joven sumamente conocido de la Policía, ya que tanto él como su padre, han estado involucrados en hurtos y otras maniobras delictivas.
El lugar elegido para esconder el cuerpo nunca habría sido encontrado, ya que está a tres kilómetros de la carretera.
Con frialdad, el asesino y su cómplice, cavaron un hoyo y enterraron a su víctima.
Por lo menos dos móviles policiales quedaron enterrados en el trayecto al lugar, prueba de que se trata de un rincón de difícil acceso.
En el lugar se constituyeron el Comando de Jefatura y la jueza Adriana Morosini, que ayer estaba a cargo del juzgado letrado de segundo turno, cuyo titular asumirá ésta mañana las actuaciones correspondientes.
Al atardecer de ayer, el padre de la niña asesinada regresó a la ciudad, para tomar conocimiento de los pormenores del homicidio.

0 comentarios