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CAUSA ABIERTA

El rector soberano

El rector soberano

Escribe David Stein
Cuando se haga el balance final se verá claramente que el licenciado Rodrigo Arocena ha tenido la peor gestión de que se tenga memoria en la Universidad de la República. Con su estilo soberano y la connivencia de unos pocos estudiantes de la FEUU, que lo ungieron a cambio de remuneraciones obscenas  para transformarse más que en sus asesores en "rectores" de la política universitaria, ha convertido a la Udelar en un conventillo. El señor compró butacas de lujo para el Paraninfo en plena recesión y sus adláteres académicos dijeron amén. El señor destruyó una de las obras señeras de la Universidad, el Servicio Central de Bienestar Universitario y los integrantes del CDC dijeron amén. A contrario sensu, los estudiantes de Nutrición deambulan por todo Montevideo y acuden a locales rentados a altísmo costo porque los desalojó del hospital de Clínicas. Ahora, es la Facultad de Medicina que resolvió recibir las inscripciones de los estudiantes de 1er año de la Regional Norte salteña y el soberano dijo no y el CDC volvió a decir amén. La Facultad de Medicina calificó de “centralista” la decisión del Consejo Directivo Central de la Universidad de la República por revocar la decisión de dictar cursos de 1er año de medicina en Salto, aunque la crítica no deja de asombrar cuando el propio decano de dicha facultad es uno de los que nunda deja de decir amén a lo que ordena el soberano. Dice el Consejo de la facultad de Medicina que "discrepa con los términos de la decisión de la mayoría del Consejo Directivo Central (CDC) de la Universidad de la República por su contenido centralista y ajeno a las normas deseables de tolerancia universitaria" por seis votos en ocho.
Esta decisión se contrapone justo cuando el presidente electo José Mujica, ha decidido extender la descentralización universitaria, solicitando una reunión con el CDC para marzo. El presidente electo parece que la tiene bien clara, pues hace mucho tiempo que viene diciendo que la Universidad de la República es autónoma, pero no soberana. Sin embargo, el intendente de Maldonado abre la caja y le da al soberano 250 mil dólares para una casa universitaria en el Este del país, cuando la Udelar tiene un presupuesto monstruoso del que nunca da cuenta, pese a que el propio ministro de Economía se lo ha exigido en reiteradas oportunidades.
Las diferencias sobre la conducción de la Universidad salieron a luz nuevamente cuando el CDC de la Universidad de la República revocó la resolución del 30 de diciembre del Consejo de la Facultad para que desde abril iniciara el curso de 1° de Medicina en la Regional Norte, de Salto.
Según los argumentos esgrimidos, la revocación se debió a la falta de presupuesto (planteo asombroso) y en "rechazo" por no haberse tomado la decisión con la previa autorización de la Comisión Coordinadora del Interior y el CDC a fin de "garantizar la concordancia de las acciones con las políticas generales que la institución ha acordado respecto a su trabajo en el interior así como su sustentabilidad en el tiempo". El no haber respetado el proceso de aprobación causó gran malestar (¿?) entre los presentes del CDC. Hecho que fue defendido durante la sesión por el decano de Medicina, Felipe Schelotto, dado que contaba con el apoyo de la comunidad.
A su vez, la Facultad sostuvo la posibilidad de que toda o parte de la actividad formativa de sus estudiantes se realice fuera de los límites de la capital, concepto que fue avalado por unanimidad. También resolvieron que todas las inscripciones de los estudiantes para cursar el primer año de la carrera de Medicina se recibirán desde ahora en la Bedelía central de la Facultad, incluyendo las que ya se han realizado en Salto. La gestión efectuada por los delegados de la Facultad de Medicina durante este proceso fue respaldada por todos sus integrantes en claro rechazo al CDC.
En el Norte el equipo de la Regional se reunió ayer para evaluar la situación y se decidió que se realizará un comunicado público firmado por la Fundación Universitaria de la Regional Norte, que reúne al Club de Leones y al Rotary Club, entre otras instituciones que apoyaron la iniciativa.
El director de la Regional Norte, Alejandro Novoa, dijo a Ultimas Noticias que la posibilidad de contar con 1er año de Medicina en Salto era "un proyecto muy sentido por la comunidad, ya que diversos actores contribuyeron". Las organizaciones de la sociedad civil recaudaron aproximadamente $ 2.500.000, que se destinarían a infraestructura y equipamiento, pero esto no era suficiente para solventar los gastos de los docentes ni aseguraba la continuidad de ese grado, en la medida de que la Udelar, obviamente, debía hacerse cargo de la contrapartida faltante.
El CDC junto a la Comisión Coordinadora del Interior se comprometieron a buscar las alternativas pertinentes para que los 60 estudiantes inscriptos puedan continuar sus estudios. Aunque aún no existe una decisión tomada, en la sesión del martes se mencionó la posibilidad de otorgarles una beca a través del Fondo de Solidaridad o el Servicio Bienestar Universitario o incluso adelantar el Ciclo Optativo Inicial del Área Salud -que permite un acercamiento al área que habilita a realizar las distintas carreras vinculadas al sector: Medicina, Enfermería, Odontología, entre otras. Es llamativo que el CDC diga eso en la medida en que Bienestar Universitario no tiene presupuesto para becas porque el popio cuerpo no lo votó.
La Udelar es autónoma, se sabe, pero a esta altura de los acontecimientos habría que buscar alguna forma para que el Estado haga una auditoría en serio porque le ha llegado un río de dinero. Sin embargo, los servicios esenciales como Nutrición, Bienestar, Enfermería, el Instituto de Educación Física, las Escuelas de Tecnologías Médicas no tienen dónde funcionar, en tanto el hospital universitario, que se lleva una porción grande de la torta, es un páramo.

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