Llegaron a Uruguay los restos de los seis militares fallecidos en Haití

Autoridades militares, nacionales y los deudos de las víctimas recibieron los restos de los seis fallecidos en Haití el pasado viernes, en una ceremonia en la Base Aérea N° 1 de Carrasco.
El presidente Tabaré Vázquez asistió a la ceremonia oficial junto al vicepresidente Rodolfo Nin Novoa y del ministro de Defensa Nacional, Gonzalo Fernández. El primer mandatario saludó a los familiares de las víctimas.
El velatorio institucional es en la sede del Club de la Fuerza Aérea (Lido 1800 casi Avda. Italia) con posterior traslado a las ciudades de Treinta y Tres y Minas, y al Panteón de la Fuerza Aérea, en el Cementerio del Norte, para los sepelios.
Los féretros llegaron en una aeronave de la Fuerza Aérea Brasileña (FAB), fletada por Naciones Unidas a la Brigada Aérea 1 de Carrasco. Los fallecidos llegaron al país cubiertos por la bandera de la ONU y al arribar se les colocó el pabellón nacional.
En las bases uruguayas en Haití la de ayer fue una jornada de congoja y emoción. Militares del contingente compatriota consultados por El País señalaron que hay preocupación por el estado anímico de la fuerza. Entre los oficiales predomina la inquietud por un posible "efecto dominó" sobre la tropa tras el accidente, es decir que sobrevenga una crisis de ansiedad y tristeza que cause resultados nocivos sobre la integridad psicológica de los soldados.
La misión de estabilización de Naciones Unidas en Haití (Minustah) le dio ayer el último adiós a los once soldados y pilotos muertos en el accidente aéreo, cuyos féretros lucieron banderas de la ONU, poco antes de ser embarcados en aeronaves fletadas hacia Montevideo y Amman.
La ceremonia se llevó a cabo en el cuartel general de los militares brasileños, cerca de la ciudad de Tabarre, y en presencia del jefe de la misión, el diplomático argelino Hedi Annabi, y varios diplomáticos de países que colaboran con la fuerza.
"Ellos estaban en Haití protegiendo las fronteras del país. Proveyeron socorro a víctimas de las terribles tormentas del año pasado. Estaban ayudando al pueblo de Haití a cumplir la enorme promesa de su orgullosa nación``, dijo el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, en una carta leída por Annabi.
El presidente haitiano, Rene Preval, también asistió a la ceremonia en la base brasileña. Uno de sus colaboradores leyó una nota en la que expresó la condolencia del gobierno haitiano del presidente Tabaré Vázquez por la tragedia.
"Junto al pueblo y al gobierno haitiano, presento a las Naciones Unidas nuestras sinceras condolencias", dijo Preval en una carta en la que expresó "dolor (por) esta catástrofe que dejó a la Minustah (Misión de las Naciones Unidas para la Estabilización de Haití) en luto, particularmente a los contingentes jordanos y uruguayos".
Los 11 ataúdes fueron condecorados cada uno con una ofrenda floral. El presidente Preval otorgó el reconocimiento de la Orden Nacional al Honor y al Mérito a los efectivos uruguayos y jordanos que murieron en el accidente.
Hubo palabras alusivas del comandante Mohammed Al-Ajarmah, del Batallón jordano y del coronel Edimer Guevara, del Batallón uruguayo.
La mayoría de los seis uruguayos y cinco jordanos muertos en el accidente habían estado en Haití menos de tres meses. Sus nombres fueron leídos varias veces y sus fotografías estaban en mesas con las banderas de sus países.
El sitio del accidente fue cercado y se mantendrá bajo vigilancia estricta hasta que se haya recabado toda la información necesaria para la investigación. Según las normas internacionales, el equipo de investigación debe estar integrado por el país propietario de la aeronave (Uruguay), el país fabricante del aparato (España) y por el país donde sucedió el hecho (Haití).