Tanto va el cántaro....Oculistas y anestesistas de Uruguay son acusados por abuso de poder

Una asociación de consumidores denunció a las sociedades profesionales de anestesistas y oftalmólogos por monopolizar el mercado al topear el egreso de profesionales del área. Piden una multa de U$S 1,5 millones a cada gremial y a cada profesional.
Consumidores y Usuarios Asociados (CUA) demandó a las sociedades profesionales de oftalmólogos y anestesistas uruguayos por "incurrir en conductas anticompetitivas". La entidad asegura que la Sociedad Anestésico-Quirúrgica (SAQ), Sociedad de Anestesiología del Uruguay (SAU) y Sociedad Uruguaya de Oftalmología (SUO) violaron las disposiciones de la Ley de promoción y defensa de la competencia Nº 18.159. Así, la CUA solicita le sea aplicada a cada una de las tres entidades una multa equivalente a los 20.000.000 de UI (U$S 1.650.000) "teniendo en cuenta la entidad patrimonial del daño causado a un gran grupo de usuarios de los servicios públicos de salud, el grado de participación directa y concreta de los responsables y la existencia de intencionalidad", dice la denuncia. Asimismo, solicita que sean sancionados con el mismo monto "los profesionales que llevaron a cabo las prácticas anticompetitivas, anestesistas y oftalmólogos referidos, así como a los integrantes de los órganos de administración y representación que hayan contribuido activamente en el desarrollo de la práctica". De ser favorable el pronunciamiento respecto a la demanda, el dinero pasará a arcas del Estado.

EN EL MEF

La demanda fue presentada ante la Dirección General de Comercio en el Ministerio de Economía y Finanzas el 23 de enero de 2008. También ante el Ministerio de Salud Pública (MSP) y la Administración de los Servicios de Salud del Estado (Asse).
"En su momento la ministra (María Julia Muñoz) dijo que estaban pensando en decretar la esencialidad porque los profesionales no querían operar pacientes de bajos recursos", contó a Ultimas Noticias la presidente de CUA, Yandira Vega.
Desde el MEF fueron consultados por el caso tres abogados del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social. Uno de ellos opinó que se trata de "un problema gremial". Posteriormente, en el seno de la Comisión de Promoción de la Competencia se creó un grupo integrado por dos economistas y un abogado para analizar el tema. Hasta el momento no se han expedido.

POOL

Según Vega, las sociedades de profesionales abusan de posición dominante al topear el egreso de profesionales en el área y establecer los precios por las intervenciones quirúrgicas: "Es un pool porque las cátedras, que están íntimamente vinculadas a estas sociedades, limitan el acceso de los muchachos a las especialidades", dijo.
Según datos que la presidenta de CUA proporcionó a Ultimas Noticias y que constan en el expediente de la demanda, "entre los años 1986 y 2007 egresaron 13 anestesistas, mientras que fueron 5 los nuevos especialistas en oftalmología entre 1987 y 2007", dijo Vega. Así, hasta el 30 de junio de 2007 estaban registrados 6.694 médicos en actividad, de los cuales 308 son anestesistas (2,2%) y 152 oftalmólogos (1,1%).
La institución, además de afirmar que "las sociedades (profesionales) siempre han luchado por monopolizar e intentar reducir al máximo el número de médicos en su especialidad", asegura que hay más prácticas fuera de lugar.
Para Vega, el hecho de que se vede el acceso a las especialidades redunda en que haya menos profesionales capacitados para desempeñar las tareas en los círculos de atención pública. "Las personas que llegan para ser operadas, por ejemplo, en el Hospital Pereira Rossell, son derivadas a las mutualistas privadas mediante los convenios que existen. Pero el Estado tiene que pagar por esa operación", contó Vega.
La argumentación de las sociedades, según la CUA, es que el mecanismo permite "conservar la calidad de la formación". "Tenemos una situación de extrema crisis actual, reflejada en el hecho de contar con centros asistenciales totalmente equipados, con tecnología de última generación o única en el país, que no funcionan por falta de profesionales. También largas listas de espera de usuarios de Salud Pública que no pueden acceder a los costos de la asistencia privada, donde estos médicos se benefician de un pago especial mucho más elevado y costoso", dice el escrito.
"Una operación oftalmológica en clínicas privadas cuesta entre U$S 1.500 y U$S 2.000 por ojo" dijo la presidenta y afirmó que los profesionales captan clientes dentro de las mutualistas porque no los operan allí. "Hay un decreto del MSP del año 1998 que dice que las sociedades médicas tienen que ofrecer estas operaciones, pero en contrapartida tienen que pagarle U$S 300 por cada una a los médicos. Como no les conviene, hacen la vista gorda mientras los profesionales consiguen sus clientes y los operan afuera", contó Vega.

Operación Milagro

Cuando el gobierno comunicó que implementaría el programa de intervenciones oftalmológicas "Operación Milagro" para personas de bajos recursos con médicos cubanos, la Sociedad Oftalmológica Uruguaya alegó que se les estaban quitando puestos de trabajo a los profesionales uruguayos. Asimismo, el programa se llevó a cabo. La primera operación se realizó el 25 de marzo de 2008 y hasta el momento fueron 10.000 los casos atendidos.

Conferencia del MEF sobre competencia

La Comisión de Promoción y Defensa de la Competencia convoca a la actividad académica "Estrategias de investigación de prácticas colusivas", que se desarrollará el lunes 6 de julio de 13 a 17 h en el salón de actos del Banco Central del Uruguay (Diagonal Fabini 777). El presidente de la Comisión Nacional de la Competencia de España, Luis Berenguer, será el expositor invitado. Está previsto que se realice una mesa redonda con la participación de especialistas en el tema. Más información: [e-mail]. (Ultimas Noticias)

En Uruguay, tanto los oftalmólogos como los anestesistas han demostrado en los últimos años un desprecio hacia la solidaridad casi sin parangón entre otros profesionales de la salud. Muchos de ellos han amasado fortunas, cobrando sumas astronómicas a contramano de la paupérrima situación económica de miles de uruguayos, sin que nadie les pusiera coto. Enhorabuena, pues, esta denuncia contra las mafias médicas.