Comerciantes de Montevideo toman la delantera y matan a los delincuentes

Otro caso de supuesta defensa personal se registró en la ciudad de Montevideo cuando un comerciante mató de tres disparos a un peligroso delincuente. El caso deberá ser analizado cuidadosamente por el magistrado, en virtud que los proyectiles impactaron en la zona lumbar y la espalda y el maleante no efectuó disparo alguno y se daba a la fuga cuando fue abatido. Otros dos delincuentes que lo acompañaban lograron escapar. El asalto se produjo en las primeras horas de la tarde de ayer durante los festejos céntricos por el triunfo de Uruguay en el torneo mundial. El negocio donde ocurrió el sangriento episodio se encuentra emplazado en la calle Tacuarembó entre Colonia y 18 de Julio. Se trata de un salón a cuyo frente se encontraba el hijo del propietario, cuando próximo a la hora 13 de ayer, ingresó un hombre, mientras que otros dos se quedaron en la puerta. El comerciante presumió que se trataba de un cliente, a la vez que por el exterior del local pasaban numerosas personas festejando el triunfo uruguayo frente a México. Sin embargo, el sujeto mostró sus verdaderas intenciones al sacar a relucir un revólver y amenazarlo al tiempo que le exigió la entrega del dinero. Ante esto, el hombre retiró la suma que estaba en la caja de valores y se la dio. En el momento que el delincuente emprendía la huida, el encargado del local tomó una pistola calibre 9 mm y al presumir que el individuo le iba a tirar, le efectuó varios disparos.
El asaltante caminó unos pasos y se desmoronó en la vereda, mientras que sus dos cómplices huyeron y se perdieron de vista entre la multitud. Efectivos policiales arribaron al lugar junto a una unidad médica de emergencia móvil. Los facultativos asistieron al maleante, pero nada pudieron hacer y falleció como consecuencia de tres impactos de bala que lo alcanzaron en la zona lumbar y la espalda respectivamente.
En el lugar del hecho, los funcionarios actuantes incautaron el arma del comerciante y el revólver calibre 38 del delincuente que carecía de proyectiles y que pertenecía al Instituto Policial. En efecto, fue robado hace más de un mes a una mujer policía, a quien sorprendieron dos hombres cuando retornaba a su domicilio luego de cumplir con un servicio de vigilancia por artículo 222. Fue brutalmente golpeada y arrojada a una cuneta por estos individuos que le robaron su arma de reglamento.
El delincuente abatido fue identificado como Jorge Eduardo Baratta, de 31 años, poseedor de antecedentes penales que hace poco salió de prisión tras cumplir su condena.
El juez fue informado sobre el hecho y dispuso que el comerciante no fuera privado de su libertad, pero deberá comparecer hoy ante su presencia para aclarar ciertos puntos sobre lo sucedido El magistrado aguarda el resultado de los peritajes realizados por personal de la Policía Técnica.
Tenía antecedentes penales por hurto y rapiña
El delincuente abatido contaba con varios antecedentes penales y era considerado un elemento peligroso. Jorge Eduardo Baratta, de 31 años, fue procesado en el mes de enero del año 2000 por el cargo "tentativa de hurto". Estuvo un par de meses preso, pero en julio de ese mismo año fue nuevamente apresado y otra marchó a la cárcel por el cargo de "hurto agravado". Pero sin duda su delito más importante ocurrió en el año 2002 cuando copó un comercio situado en Emancipación y Galván. Cuando huía con otro sujeto se registró un intercambio de disparos con la Policía pero el maleante consiguió escapar. Sin embargo, meses después, en marzo de 2003, fue capturado por personal del Departamento de Hurtos y Rapiñas y procesado por "rapiña especialmente agravada en reiteración real con un delito de atentado". Hace poco que salió de prisión y ahora fue ultimado al intentar cometer otro delito.